Portada » Historia » La Historia de España (1923-1939): De la Dictadura de Primo de Rivera al Fin de la Guerra Civil
En 1923, el general Miguel Primo de Rivera encabezó un golpe de Estado e instauró una dictadura de derechas para acabar con los problemas surgidos a lo largo del reinado de Alfonso XIII. La dictadura consiguió el apoyo de casi todos los sectores sociales: los empresarios, la Iglesia y el Ejército, que consideraron que acabaría con los desórdenes sociales. Alfonso XIII aceptó la dictadura y lo nombró presidente de un Gobierno militar.
A partir de 1928, aumentó la oposición al Gobierno de Primo de Rivera. Esta situación de malestar empeoró debido a la crisis económica de 1929. Finalmente, el rey retiró su confianza al dictador. En enero de 1930, Primo de Rivera dimitió y se restableció la monarquía parlamentaria.
En abril de 1931, tras la restauración de la monarquía parlamentaria de Alfonso XIII, se celebraron elecciones municipales. En las ciudades, el triunfo lo obtuvo la coalición republicano-socialista. Ante estos resultados, Alfonso XIII decidió abandonar el país, y el 14 de abril se proclamó la Segunda República.
En la evolución de la Segunda República se pueden distinguir tres etapas:
Niceto Alcalá Zamora fue nombrado presidente de la República y Manuel Azaña, jefe de Gobierno. Una de las primeras medidas adoptadas fue elaborar una nueva Constitución (1931). Las principales reformas fueron:
Las medidas reformistas provocaron descontento en sectores sociales conservadores y se produjo un intento de golpe de Estado militar que fracasó (1932). Pero las reformas tampoco contentaron a los sectores más radicales de izquierdas, que protagonizaron numerosas huelgas y enfrentamientos con las fuerzas de orden público. Manuel Azaña dimitió como presidente del Gobierno.
La victoria de los partidos de centro-derecha dio paso a un Gobierno conservador. El presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora, nombró jefe del Gobierno a Alejandro Lerroux, quien paralizó las reformas iniciadas en la etapa anterior. Esto provocó una huelga general en octubre, conocida como la Revolución de 1934, que fracasó en todo el país excepto en Asturias y Cataluña.
La revolución finalizó con la intervención del Ejército. En Asturias, las tropas dirigidas por el general Francisco Franco reprimieron con dureza el movimiento revolucionario, y en Cataluña se suspendió el Estatuto de Autonomía. De nuevo, la tensión política y el malestar social, debido a la actuación del Ejército en la represión obrera, obligó a celebrar nuevas elecciones.
Los partidos de izquierdas (socialistas, comunistas y republicanos) formaron una coalición, el Frente Popular, y ganaron las elecciones en febrero de 1936. Manuel Azaña se convirtió en presidente de la República y Casares Quiroga en jefe del Gobierno. Se reanudó la reforma agraria (nuevas expropiaciones) y se restauró el Estatuto de Autonomía de Cataluña. Esto provocó el aumento de la conflictividad social: los militantes de extrema derecha (falangistas) y extrema izquierda (anarquistas, comunistas) se enfrentaron en las calles.
La Guerra Civil fue un conflicto bélico que se desarrolló entre 1936 y 1939, en el que se enfrentó la población española. El resultado final de la contienda fue la sustitución de la República, como forma de gobierno, por una dictadura encabezada por el general Francisco Franco.
El 17 de julio de 1936, un sector del Ejército, el más conservador y antirrepublicano, se sublevó en Marruecos contra el Gobierno de la República. El 18 de julio, la sublevación, dirigida por los generales Emilio Mola, José Sanjurjo y Francisco Franco, se extendió por la península. Las causas profundas fueron:
El alzamiento militar del 18 de julio de 1936 se transformó en una guerra civil por la resistencia que opusieron los republicanos. El resultado fue la división de España en dos bandos:
A nivel internacional, recibió los siguientes apoyos:
Liderado por el general Francisco Franco, recibió apoyo de:
En marzo de 1939, el Ejército Nacional tomó Madrid y el 1 de abril de 1939 terminó la guerra. Las principales consecuencias de la Guerra Civil fueron:
En 1945, antes de finalizar la Segunda Guerra Mundial, el presidente de los Estados Unidos (Roosevelt), el primer ministro de Reino Unido (Churchill) y el presidente de la URSS (Stalin) comenzaron a reunirse para diseñar los acuerdos de paz. Las reuniones más destacadas fueron:
Finalizada la conferencia, en noviembre de 1945, los países aliados celebraron los Juicios de Núremberg (Alemania), donde los principales dirigentes y colaboradores nazis fueron juzgados por los crímenes de guerra.
Como fruto de un acuerdo entre los aliados, en la Conferencia de San Francisco (1945), se creó la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que sustituía a la Sociedad de Naciones.
Los objetivos de este organismo internacional, que tenía carácter neutral, eran:
La ONU promovió la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y adoptó nuevas medidas como la mediación (intervención diplomática) o el envío de cascos azules (fuerzas armadas al servicio de la ONU cedidas por los estados miembros) a zonas conflictivas.