Portada » Filosofía » Comprendiendo la Ética, Valores y Moral: Un Enfoque Integral
Designamos con la palabra “ética” el comportamiento, la conducta y el actuar del ser humano como tal. La ética es aquella instancia desde la cual juzgamos y valoramos la forma como, de hecho, se comporta el hombre y, al mismo tiempo, la instancia desde la cual formulamos principios y criterios acerca de cómo debemos comportarnos y hacia dónde debemos dirigir nuestra acción.
Se denominan valores al conjunto de pautas que la sociedad establece para las personas en las relaciones sociales.
Su estudio corresponde a la axiología, una rama de la filosofía, y de una forma aplicada pueden ocuparse otras ciencias como la sociología, la economía y la política, realizándolo de manera muy diferenciada. Conceptos relacionados con los valores incluyen: deontología, creencias, dogmas, estética, ética, moral, principios, prioridades, tradiciones, etc., así como actas y declaraciones de derecho.
La solidaridad es el vínculo que une a personas y pueblos de modo que el bienestar de unos determina el de los otros. Es el acto mediante el cual una persona se adhiere a la causa, necesidad o interés de otra persona.
Actúa a favor de otras personas desinteresadamente y con alegría, teniendo en cuenta la utilidad y la necesidad de la aportación para esas personas, aunque le cueste un esfuerzo.
Las fuentes de la dignidad humana constituyen su conciencia, inteligencia, voluntad, libertad y el sentido moral de sus actos; todo esto se manifiesta en ser responsables; es decir, en la capacidad de responder a sus obligaciones.
La veracidad es un valor en el que las personas dicen o profesan siempre la verdad con eficacia y logran hacer efectivo un intento o un propósito. Se trata de decir cómo son realmente las cosas, los sucesos y las acciones que comentamos o que vemos cometerse, en contraste con la mentira.
Algunos valores fundamentales que guían nuestra acción incluyen:
La educación y formación de valores comienzan sobre la base del ejemplo, pero estos no se pueden reducir a los buenos ejemplos y el modelo del profesor, por lo que la formación de valores es un proceso gradual, donde es necesario buscar e indagar cuáles valores y por qué vías se deben formar, desarrollar, afianzar y potenciar en diferentes momentos de la vida, según las necesidades que se van presentando en la formación de un profesional.
La familia es un elemento de la estructura social de la sociedad que, en su condición de comunidad social estable, desempeña un papel rector en la actividad vital de los seres humanos, a través de la organización en común de la vida de los cónyuges y sus descendientes sobre la base de un sistema único de relaciones familiares cotidianas, en cuyo seno tiene lugar la producción de la vida ajena mediante la procreación y el proceso inicial fundamental de la socialización del individuo. El proceso educativo de la familia, además de ser estimulado por la sociedad, depende de una serie de regularidades propias para cada familia determinada en las costumbres. Es por ello que la familia desempeña un papel primordial en la formación de los valores que existen en la sociedad y su transmisión de una generación a otra.
Se denomina moralidad o moral al conjunto de creencias y normas de una persona o grupo social determinado que ofician de guía para el obrar, es decir, que orientan acerca del bien o del mal (correcto o incorrecto) de una acción.
La palabra «Moral» tiene su origen en el término del latín mos, moris, cuyo significado es «costumbre». Moralis (del latín mos, cuyo significado es ‘costumbre’). Por lo tanto, «moral» no acarrea por sí mismo el concepto de malo o de bueno. Son, entonces, las costumbres las que son virtuosas o perniciosas. Podría definirse también como: la suma total del conocimiento adquirido con respecto a lo más alto, bueno y noble a lo que una persona se apega.
Es el modo de vida desarrollado por un pueblo, determinando cómo los individuos que pertenecen a este pueblo se desenvuelven, abarcando nuestro actuar, sentir, pensar, creer y decir. Por ejemplo, todos los seres humanos tenemos la necesidad de vestirnos; cómo lo hagamos, qué usemos y dónde lo adquiramos dependerá de la sociedad en que habitemos.
La cultura es el conjunto de valores, conductas humanas, símbolos, creencias, pensamientos y sueños de una sociedad, siendo el núcleo o esencia de esta las ideas tradicionales de un pueblo determinado.
Es la ciencia que se encarga del tratamiento automático de la información. Este tratamiento automático es el que ha propiciado y facilitado la manipulación de grandes volúmenes de datos y la ejecución rápida de cálculos complejos.
Consiste en separar las funciones esenciales, es decir, diferenciar entre lo que se debe hacer y lo que se hace. El análisis no es trabajo de una sola persona; cuantas más críticas se hagan y más ideas se aporten, se evitará incluir cosas que no sirvan.
Es una reducción de un texto, al que llamaremos texto de partida, en unas proporciones que pueden ser propuestas, pero que, en general, suele ser un 25% del texto de partida, escrito con las propias palabras del autor del resumen.