Portada » Psicología y Sociología » Principios Clave de Influencia Social y Motivación en el Ámbito Laboral
Este documento explora principios fundamentales de la psicología social y la motivación, cruciales para comprender el comportamiento humano en contextos grupales y laborales.
Es el proceso de influencia social por el que una persona o una minoría modifica sus sentimientos, opiniones y conductas en dirección a la posición mantenida por el grupo mayoritario, como resultado de la presión física o simbólica que este ejerce.
Es el proceso de influencia de la minoría sobre la mayoría. Es decir, en una situación en la cual la mayoría ya ha elaborado un criterio, este se modifica a causa de la influencia de la minoría.
Es un caso particular del conformismo (influencia de la mayoría cuantitativa sobre la minoría) que se produce cuando la influencia es ejercida por una figura de autoridad y poder (mayoría cualitativa). En algunos casos, los sujetos obedientes pueden llegar a realizar conductas que de forma individual deplorarían.
Se activa a través de aspectos del trabajo que no son propios de la actividad que realiza el trabajador/a en su puesto, sino que están relacionados con el contexto laboral y de los cuales se experimenta un control externo. Por ejemplo, personas que ocupan un determinado puesto porque necesitan el sueldo o porque es el único puesto que han conseguido, aunque su trabajo u ocupación no les satisfaga.
Se activa por necesidades, valores, metas y pensamientos generados directamente por la actividad laboral, relacionados con el contenido del trabajo y de los cuales la persona percibe un control interno. Es la propia actividad laboral la que es en cierto modo gratificante y de esta forma el trabajador/a siente que sus resultados dependen especialmente de sí mismo.
La teoría de la equidad defiende que las personas decidirán esforzarse más o menos en el trabajo si perciben un equilibrio o equidad entre, por una parte, sus esfuerzos y resultados, y por otra, los esfuerzos y resultados de los demás. En definitiva, los individuos en el trabajo quieren sentirse justamente tratados y compensados en relación con sus esfuerzos y rendimientos y en relación con los demás.
Para Vroom, la motivación de un individuo para realizar una determinada acción depende de que crea o espere (expectativa) que el esfuerzo le permitirá conseguir un determinado resultado (instrumentalidad) y del valor o importancia que otorgue al resultado alcanzado (valencia).
A modo de conclusión: Los objetivos y metas que las personas se marcan y persiguen al trabajar determinan el nivel de esfuerzo y dedicación que están dispuestos a realizar, por lo que el trabajo del mando en la definición, en el planteamiento y en la orientación de las metas profesionales es esencial en la motivación de los grupos humanos.
A modo de conclusión: Para Bandura, el interés y la motivación que una persona tiene en su trabajo dependen, en gran parte, de que se crea capaz de conseguir buenos resultados, es decir, de que se perciba con suficiente autoeficacia. Sentirse capacitado para hacer bien un trabajo favorece el interés y el esfuerzo en realizarlo. De este modo, fomentar el sentimiento de autoeficacia de los integrantes de su equipo de trabajo es una labor primordial de los mandos.