Portada » Economía » Marketing y Mercados: Estrategias Esenciales para el Éxito Empresarial
La actividad comercial ha evolucionado a lo largo del tiempo, dando lugar a diferentes enfoques empresariales:
Las empresas con este planteamiento centran su esfuerzo comercial en la creación de productos de calidad superior, asumiendo que estos se venderán por sí mismos.
A medida que la competencia aumenta, las empresas se ven obligadas a estimular a los consumidores para que compren sus productos, a menudo a través de técnicas de venta agresivas.
Este enfoque parte de un estudio profundo de las necesidades de los consumidores para diseñar y elaborar productos y servicios adaptados a ellas, buscando la satisfacción del cliente como base del éxito.
El proceso de marketing se divide en dos grandes fases interconectadas:
El objetivo del marketing estratégico es estudiar las necesidades del mercado y su evolución con el fin de diseñar la estrategia comercial de la empresa a largo plazo.
Una vez definida la estrategia, es fundamental establecer un plan detallado para llevarla a la práctica. Aquí entra en juego el marketing operativo, también conocido como el marketing mix o las 4 P’s.
El mercado se define como el conjunto de consumidores que comparten una misma necesidad, que están dispuestos a satisfacerla y que tienen capacidad económica para ello.
(Este apartado no contiene información adicional en el documento original, pero se mantiene como categoría).
La investigación de mercados consiste en la obtención y el análisis sistemático de la información que la empresa necesita para tomar sus decisiones de marketing de manera informada.
El reto de la innovación en marketing reside en disponer de una profunda comprensión de los clientes. Mirar con los ojos del cliente y tener en cuenta su perspectiva permite descubrir oportunidades totalmente nuevas a la hora de diseñar productos y servicios innovadores o de idear nuevos modelos de negocio que realmente satisfagan sus necesidades y deseos.
La segmentación de mercados es un proceso de división del mercado total en segmentos de consumidores con necesidades, características o comportamientos homogéneos, con el objetivo de que las empresas puedan establecer una oferta comercial diferenciada y adaptada para cada segmento. Para ello, se tienen en cuenta varios criterios:
El mercado objetivo o público objetivo es el conjunto de consumidores a los que la empresa se dirige; es la parte del mercado donde decide competir.
Existen tres estrategias principales para abordar los segmentos de mercado:
El posicionamiento de mercado consiste en decidir qué percepción se quiere que los clientes tengan de un producto o marca en relación con la competencia. Es la imagen mental que la empresa busca crear en la mente del consumidor. Algunas ideas clave para el posicionamiento incluyen: