Portada » Diseño e Ingeniería » Manejo y Propiedades del Concreto Fresco: Colocación, Segregación e Hidratación
Desde el momento en el que el agua y los otros ingredientes del concreto están en contacto con el cemento, se inicia un cambio gradual del concreto fresco, hasta transformarse en un cuerpo rígido y endurecido en algunas horas.
Es el mayor o menor grado de deformación del concreto y, en consecuencia, su capacidad para ocupar todos los espacios vacíos del molde donde se coloca. La consistencia en el concreto fresco puede medirse por medio de la prueba de revenimiento (slump test).
La segregación es la separación de los componentes de la mezcla de concreto, lo que afecta negativamente su uniformidad y resistencia.
Se debe poner énfasis en que el concreto se debe colocar siempre directamente en la posición que ha de permanecer y nunca se debe permitir que fluya o se trabaje a lo largo de la cimbra. Esta prohibición incluye el uso del vibrador para esparcir el concreto sobre un área grande.
Es la parte medular de las actividades previas a la colocación del concreto. Debe contemplarse:
La cimbra debe dar como resultado una estructura que cumpla con la forma, la alineación y las dimensiones de los elementos. Además, durante la colocación del concreto debe ser completamente segura.
Los planos de la cimbra deberán estar disponibles en todo momento. Durante la revisión de la cimbra, previo al colado, deberán verificarse los siguientes aspectos:
Se deben verificar los siguientes puntos respecto al acero de refuerzo:
Es la presencia o exudación de agua en la superficie del concreto después de que ha sido compactado, pero antes del fraguado. Forma un sistema de drenaje en el concreto, facilitando la permeabilidad de fluidos hacia su interior, aumentando la porosidad y la permeabilidad, y reduciendo la resistencia y durabilidad del concreto. Esto se debe a que los componentes sólidos de la mezcla no pueden retener el agua cuando se asientan en el fondo.
Determina la facilidad de colocación del concreto. Es el factor que trata de eliminar la segregación durante la colocación del concreto fresco. En otras palabras, es la cantidad de energía necesaria para lograr la compactación completa del concreto sin presentar segregación.
Es una propiedad que se relaciona con el producto terminado; es decir, el concreto debe contar con una trabajabilidad tal que permita la compactación con densidad máxima mediante una cantidad razonable de trabajo.
Es la reacción química entre el cemento y el agua mediante la cual el cemento se endurece y adquiere resistencia. Cuando se mezcla el cemento con agua, los compuestos del cemento reaccionan con el agua formando productos de hidratación.
