Portada » Psicología y Sociología » Estrategias para la Gestión del Estrés en el Entorno Laboral
medio para el logro de los objetivos.
es un conjunto de personas para cumplir el logro de los objetivos, y para lograrlo se utilizan distintos recursos.
es el encargado de dirigir la organización a través de los pasos del proceso de la administración.
proceso de hacer que las actividades se cumplan con eficiencia y eficacia por medio de otras personas.
relación entre insumos y producción que busca minimizar el costo de los recursos.
es el logro de las metas haciendo una buena administración de los recursos.
los individuos somos similares, pero también únicos. El estudio de las diferencias individuales, como las actitudes, las percepciones y las habilidades, puede ayudar a los jefes a comprender las diferencias en los niveles de rendimiento.
deseo de las personas para cumplir con la misión asignada y disposición de emplear grandes niveles de esfuerzo. Para alcanzar las metas organizacionales, a condición de que el esfuerzo satisfaga alguna necesidad.
medida de intensidad o impulso.
estado interno que hace ciertos resultados nos parezcan atractivos.
Es el proceso mediante el cual los gerentes utilizan medios para que sus subordinados cumplan voluntariamente con la tarea encomendada.
es un fenómeno emocional que se suele considerar como algo que implica la interacción del individuo con su entorno. La mayoría de las definiciones de estrés reconocen al individuo y al entorno en términos de una interacción por estímulo, una interacción por respuestas o una interacción por estímulo-respuesta.
Una respuesta adaptativa, condicionada por las diferencias individuales y/o los procesos psicológicos, que es consecuencia de cualquier acción, situación o suceso externo (del entorno) que imponga unas excesivas exigencias psicológicas y/o físicas de la persona.
estado de ánimo en el que el individuo es proclive a expresar y experimentar un estrés negativo, como la ira, el miedo o la depresión. La gente con una alta afectividad negativa tiene más probabilidades de expresar y experimentar niveles mayores de estrés negativo que los que tienen una afectividad negativa baja. Una persona con afectividad negativa alta será iracunda, temerosa y depresiva, tendente a fijarse en los aspectos negativos de la vida, del trabajo y del entorno.
