Portada » Economía » Principios Contables Clave: Resultado, Patrimonio Neto y Sociedades de Capital
El cálculo del beneficio contable puede realizarse mediante diferentes métodos, cada uno con sus particularidades:
Este método se basa en la fórmula: Resultado del periodo = PN final − PN inicial (donde se excluyen las aportaciones y distribuciones de recursos por los socios). Sin embargo, este método no detalla las causas que han generado el beneficio o la pérdida del periodo.
En este enfoque, el resultado del periodo se obtiene a partir de la agregación de los resultados de las operaciones realizadas por la empresa, excluyendo las transacciones con los socios. La fórmula utilizada es: Resultado del periodo = Ingresos del periodo − Gastos del periodo. (La presentación del resultado puede variar dependiendo de cómo se agrupen los ingresos y gastos).
Los impuestos sobre el beneficio son impuestos directos que se liquidan a partir del resultado empresarial, calculado según las normas fiscales aplicables. Es crucial ajustar el resultado contable en aquellos puntos donde existan diferencias con la normativa fiscal.
El resultado contable y el resultado fiscal son diferentes debido a que las normativas contable y fiscal aplican criterios distintos. El proceso implica partir del resultado contable antes de impuestos y, mediante ajustes, llegar al resultado fiscal (base imponible). Estos ajustes son necesarios para reflejar las diferencias entre contabilidad y fiscalidad.
La regulación del patrimonio neto se basa en el Plan General de Contabilidad (PGC) y la Ley de Sociedades de Capital. La Resolución del ICAC de 5 de marzo de 2019 desarrolla criterios contables relacionados con la regulación mercantil de sociedades de capital, abarcando temas como:
Esta normativa es aplicable a las cuentas anuales de ejercicios iniciados a partir del 1 de enero de 2020.
El patrimonio neto se define como la parte residual de los activos de una empresa después de deducir todos sus pasivos. Este concepto incluye:
Según el IASB, el patrimonio neto también representa la parte residual de los activos tras deducir los pasivos, y su valor depende de la valoración de estos. Incluye:
El patrimonio neto se compone de:
El Plan General de Contabilidad (PGC) y la Ley de Sociedades de Capital regulan aspectos contables de las sociedades de capital. La Resolución del ICAC del 5 de marzo de 2019 establece criterios sobre:
Estas regulaciones son aplicables a cuentas anuales de ejercicios iniciados desde el 1 de enero de 2020.
Según el Artículo 273, la Junta General decide la aplicación del resultado basándose en el balance aprobado. Los dividendos solo pueden repartirse si el patrimonio neto no es inferior al capital social después del reparto. Además, los beneficios deben destinarse a cubrir pérdidas anteriores si el patrimonio es inferior al capital social.
El Artículo 274 establece que un 10% del beneficio se destina a la reserva legal hasta alcanzar el 20% del capital social, y solo puede utilizarse para compensar pérdidas si no hay otras reservas disponibles.
Un instrumento de patrimonio refleja una participación residual en los activos de la empresa tras deducir sus pasivos. Las transacciones con estos instrumentos se registran en el patrimonio neto, sin reconocer activos financieros ni resultados en pérdidas y ganancias. Los gastos asociados se contabilizan como menores reservas, y solo se registran en la cuenta de pérdidas y ganancias si la transacción se abandona.
El balance separa activo, pasivo y patrimonio neto. El capital social y la prima de emisión se registran como “Capital” y “Prima de emisión” si están inscritos en el Registro Mercantil. De lo contrario, se reflejan como Otros pasivos financieros o Otras deudas a corto plazo.
Las sociedades de capital incluyen la sociedad de responsabilidad limitada, la sociedad anónima y la sociedad comanditaria por acciones. En las dos primeras, el capital se divide entre socios y estos no responden personalmente de las deudas; en la comanditaria, al menos un socio sí responde personalmente.
La sociedad mercantil debe ser de capital, donde el capital proviene de las aportaciones de los socios. En la sociedad anónima, el capital se divide en acciones, que son partes alícuotas, indivisibles y acumulables.
Los socios tienen derechos como:
El capital social puede aumentarse mediante:
Los aumentos pueden hacerse con nuevas aportaciones dinerarias o no dinerarias, con cargo a beneficios o reservas.