Portada » Historia » La Gran Guerra: Un Recorrido por sus Causas, Fases y Consecuencias
El mundo de comienzos del siglo XX, conocido como la Paz Armada, se caracterizó por:
Conflicto entre las grandes potencias por el control de las colonias, sobre todo en África.
La Segunda Revolución Industrial extendió la industrialización y enfrentó a las grandes potencias.
Las tensiones imperialistas llevaron a que la industria de las potencias se pusiera al servicio del sector armamentístico.
La rivalidad entre las potencias llevó a la creación de bandos aliados:
Formada en 1882 por Alemania, Austria-Hungría e Italia, con dominio de Alemania (bajo la influencia de Bismarck).
Promovida por Francia para hacer frente al auge alemán. Formada en 1907 por Francia, Inglaterra y Rusia.
Desde la Guerra Franco-Prusiana de 1870 (victoria alemana), Francia tenía un fuerte sentimiento de revancha. Existían tensiones por los territorios fronterizos de Alsacia y Lorena, que ambos países reclamaban.
En 1890, el káiser Guillermo II destituyó a Bismarck como canciller, quien se había caracterizado por una política exterior apaciguadora y de alianzas diplomáticas. Guillermo II comenzó la carrera armamentística e instauró una política exterior de enfrentamiento.
La guerra era vista como un instrumento útil para la política y para solucionar las tensiones imperialistas de la época.
Entre 1912 y 1913 se produjeron las Guerras Balcánicas, provocadas por los nacionalismos balcánicos y griegos contra el Imperio Otomano. La consecuencia fue la autonomía de las nacionalidades balcánicas, aunque bajo el control de Austria-Hungría y Rusia.
El 28 de junio de 1914, el heredero al trono austrohúngaro, Francisco Fernando, fue asesinado en Sarajevo por un joven serbio. Austria-Hungría le declaró la guerra a Serbia, y entre julio y agosto, las alianzas militares pusieron en guerra a las potencias europeas. Así dio comienzo la Gran Guerra.
Desde el comienzo de la guerra se establecieron los frentes:
Alemania atacó a Francia a través de Bélgica y fue frenada en la Batalla del Marne, cerca de París.
Alemania y Austria-Hungría atacaron a Rusia.
En 1915, los frentes se establecieron y se produjo la larga y brutal «Guerra de Trincheras», donde apenas hubo avances. El objetivo de los países en guerra era causar el máximo desgaste material y humano al adversario. Las batallas del Somme y Verdún fueron las más importantes del período por la cantidad de bajas, aunque no tuvieron mayores consecuencias bélicas.
A partir de 1917, se rompió la igualdad de los grandes frentes debido a:
A finales de 1917, los Aliados atacaron de forma coordinada a los Imperios Centrales, que no pudieron resistir. El desgaste y las derrotas llevaron a la rendición de los Imperios Centrales en noviembre de 1918, dando final a la guerra.
En la Primera Guerra Mundial comenzaron a usarse, por primera vez, los grandes acorazados, la guerra submarina, la guerra aérea y las armas químicas.
Fue la guerra más destructiva hasta entonces: 10 millones de soldados murieron. Millones de personas murieron de forma indirecta (hambrunas, epidemias, etc.).
Destrucción de la economía de Francia, Gran Bretaña y Alemania (restauración lenta y costosa). Estados Unidos se convirtió en la primera potencia económica mundial.
La guerra llevó al deterioro del nivel de vida europeo y al aumento del malestar y la agitación social. Ello, junto con el ejemplo de éxito de la Revolución Rusa, produjo un incremento de la afiliación a las ideologías marxistas en Europa. El ansia de revancha tras la guerra, las duras penas impuestas a los vencidos y el miedo al comunismo llevaron al auge de un nuevo movimiento social: el fascismo.
Reordenación del mapa de Europa y desaparición de los imperios europeos derrotados en la guerra. Creación de la Sociedad de Naciones (antecedente de la ONU) como árbitro internacional, aunque fracasó en su objetivo.
Las negociaciones que pusieron fin a la Gran Guerra se conocen como la Paz de París. Cada uno de los tratados con los derrotados conservó el nombre de los palacios cercanos a la capital francesa en los que se firmaron:
Alemania se vio obligada a asumir la responsabilidad de la guerra. Además de devolver Alsacia y Lorena a Francia, debería pagar reparaciones.
El Imperio Austro-Húngaro se desmembró.
Rumanía creció con territorios de Hungría y de Rusia. Hungría y Austria quedaron reducidos a pequeños países sin salida al mar.
Bulgaria tuvo que entregar a Grecia su costa en el Egeo.
El Imperio Otomano desapareció y fue sustituido por la República Turca. Sus territorios árabes fueron repartidos como mandatos entre británicos y franceses.