Portada » Magisterio » Fundamentos y Ámbitos de la Intervención Educativa: Rol del Profesional
La educación se refiere a un proceso que se lleva a cabo por la influencia del exterior (el ambiente, los adultos) y el desarrollo de las potencialidades individuales (la respuesta individual).
Aprendizaje: Proceso por el cual se producen cambios duraderos en la persona.
Atención: Es la satisfacción de las necesidades, lo que implica conocimiento y observación de las mismas.
Intervención: Es la acción, la actuación concreta que tiene como objetivos cambiar, mejorar y transformar una situación de partida.
Organizada por el Gobierno en diversos niveles educativos, que se desarrollan de acuerdo a la ley y que dan derecho a un título con validez oficial.
Se refiere a toda actividad educativa organizada y planificada que se realiza fuera del sistema educativo formal para suministrar ciertos tipos de aprendizaje a la población.
La educación que recibimos todos al vivir en sociedad, con constantes intercambios sociales y experiencias cotidianas que nos transmiten conocimientos, valores, actitudes… a lo largo de la vida.
Las Administraciones Educativas determinan los contenidos educativos y los requisitos mínimos (relación numérica alumno-profesor, instalaciones, número de puestos escolares…).
Centros que potencian el desarrollo de las capacidades del niño/a a través del juego. Ofrecen una amplia gama de juguetes y materiales que los niños/as pueden utilizar allí mismo o bien llevárselos prestados a casa.
La hospitalización de los niños ha sido una experiencia traumática porque suponía la separación de su familia, además de dejar de lado todas aquellas necesidades no biosanitarias.
Las actividades educativas se desarrollarán en las aulas hospitalarias y las habitaciones, según el estado de salud del niño/a. La atención educativa está basada en estos principios:
Competencia: Habilidades o capacidades que debe poseer un educador/a para realizar su trabajo de forma óptima.
El perfil de este profesional está definido por una competencia general y unas capacidades profesionales según el Decreto 1394/2007, además de sus características propias y el código deontológico.
La competencia general señala que estamos ante un profesional capaz de: Diseñar, implementar y evaluar proyectos y programas educativos de atención a la infancia en el primer ciclo de Educación Infantil (EI) en el ámbito formal, de acuerdo con la propuesta pedagógica elaborada por un maestro con la especialización de EI o un grado equivalente, y en toda la etapa en el ámbito no formal, generando entornos seguros y en colaboración con otros profesionales y con las familias.
Esta competencia general se alcanza con unas capacidades profesionales, personales y sociales.
Las características del educador se refieren a un sello personal, su forma de actuar. Podemos decir que el estilo del educador infantil puede definirse como:
La educación tiene como objetivo la atención a la infancia y se rige por una serie de principios y valores que conforman nuestro Código Deontológico (son normas y valores que formulan y asumen quienes llevan a cabo la actividad).