Portada » Psicología y Sociología » Fundamentos de Psicología Jurídica y Criminología Aplicada
La psicología forense se centra en la aplicación de la psicología en el contexto de los tribunales y el sistema de justicia penal.
La psicología jurídica se centra en la aplicación de la psicología en el ámbito legal, con un enfoque en la prevención y la intervención en problemas legales.
Es una herramienta que se utiliza para tomar testimonios de víctimas de violencia en un ambiente controlado y seguro. Su objetivo es evitar la revictimización de las personas.
Este procedimiento evita que los niños, adolescentes o personas en condiciones especiales sean revictimizados al tener que relatar varias veces los hechos.
La psicología jurídica penitenciaria es la parte de la psicología jurídica que estudia las relaciones, fenómenos, procesos y estructuras que se establecen dentro del marco penitenciario, generadas debido a que existen leyes que las crean.
Se considera a Lombroso como el primer científico interesado en expresar las teorías, permitiendo entender el comportamiento del delincuente. Elaboró la conocida “teoría del delincuente nato” que explica la predisposición a la delincuencia.
Urra señala que debemos tener en cuenta que la delincuencia es un proceso en constante cambio, puesto que los delincuentes y los procesos delictivos son un fenómeno dinámico debido al desarrollo tecnológico y a la evolución social.
El psicólogo penitenciario es aquella persona que trabaja en el estudio de los pensamientos, emociones y la conducta de individuos encarcelados en las instituciones penitenciarias.
El campo de actuación de un psicólogo en el medio penitenciario es muy amplio y diverso. Trabajan en instituciones donde personas privadas de su libertad pasan las 24 horas del día, realizando diversas actividades educativas, escolares, deportivas, etc.
Soria y González (2005) señalan que el psicólogo debe tener en cuenta cuatro directrices esenciales en las intervenciones psicológicas:
La evaluación penitenciaria es un proceso que realiza el psicólogo para valorar el estado mental, emocional y conductual de los internos.
Su objetivo es determinar aspectos como el riesgo de reincidencia, la peligrosidad, la presencia de trastornos psicológicos y la capacidad de reinserción. Esta evaluación orienta decisiones sobre tratamientos, beneficios penitenciarios y seguimiento dentro del sistema carcelario.
La exposición a un ambiente violento convierte al niño en una víctima de la violencia en doble sentido, con efectos en el desarrollo emocional y psicosocial, desórdenes conductuales y emocionales, conducta agresiva y antisocial, y expectativas de felicidad posible.
Agresión observada en los medios de comunicación. Existe cierto consenso por el que se considera que los medios de comunicación actúan sobre la realidad promoviendo y difundiendo aspectos que regulan la vida de las personas y sus visiones del mundo.
Efectos en el desarrollo emocional y psicosocial: desórdenes conductuales y emocionales, conducta agresiva y antisocial, autoestima, desarrollo moral, expectativas de felicidad futura.
Ofrecen un amplio abanico de episodios que:
El perfil criminológico puede definirse como una estimación acerca de las características biológicas y del estilo de vida del responsable de una serie de crímenes graves y que aún no se ha identificado.
La elaboración de perfiles criminales desconocidos con base en la escena del crimen es una técnica de investigación que consiste en inferir aspectos psicosociales del agresor con base en un análisis psicológico, criminalístico y forense de sus crímenes, con el fin de identificar un tipo de persona para orientar la investigación y la captura.
Perfil de agresores conocidos o método inductivo y deductivo. Los perfiles inductivos se basan en la recopilación de datos de casos previos similares para identificar patrones de conducta, mientras que los perfiles deductivos se enfocan en el análisis de la escena del crimen y las pruebas para deducir características del agresor.
Es el método que usa el asesino para llevar a cabo su crimen y describe las técnicas y las decisiones que el asesino ha tenido que tomar.
El modus operandi tiene una naturaleza funcional y tiene tres metas:
Por lo que se refiere a la firma, esta es el motivo del crimen porque se refleja la razón por la que el asesino hace lo que hace.
La víctima tiene una importancia crucial, puesto que es la protagonista del hecho criminal, presencia el crimen en primera persona, sobre ella recae el acto criminal y se representan el modus operandi y la firma del asesino.
La criminología se entiende como una ciencia social que estudia las causas y circunstancias de los distintos delitos, la personalidad de los delincuentes y el tratamiento adecuado para su represión.
La Criminología Positiva surgió en Italia a finales del siglo XIX como crítica a la Criminología Clásica, que se basaba en métodos deductivos y abstractos. La escuela positiva, en cambio, proponía un método inductivo basado en la observación de datos reales.
Desde el enfoque biológico, la etiología del delito se entiende como resultado de una alteración orgánica o patológica, asociando la conducta delictiva a estigmas físicos o características hereditarias y degenerativas.
César Lombroso fue pionero de la antropología criminal. En su obra ‘Tratado Antropológico Experimental del Hombre Delincuente’ (1876) propuso que las características mentales de los individuos están subordinadas a causas fisiológicas y que los delitos se originan más por factores biológicos hereditarios y degenerativos que sociales. Su principal aporte fue el empleo del método empírico, fundamentando sus estudios en la observación y medición de características físicas de los delincuentes.
Para Lombroso, la explicación del crimen reside principalmente en causas internas de orden biológico, más que en factores sociales. Consideraba que existían características anatómicas y fisiológicas heredadas que predisponían al individuo al delito.
Esta teoría se centra en la forma de pensar del ser humano, es decir, estudia el delito como consecuencia del mundo psíquico o anímico del hombre mediante el estudio de la psicopatología o del psicoanálisis.
La palabra «personalidad» proviene etimológicamente del griego prosopón, que significa “máscara”. La personalidad se refiere a la organización del individuo desde las características que describen su comportamiento y forma de pensar. Se caracteriza por permanecer estable durante la vida del individuo, teniendo en este aspecto un cierto carácter genético.
El contacto con jóvenes delincuentes y la edad del primer delito son predictores importantes.
Henggeler identifica que las relaciones familiares inadecuadas, la falta de atención materna y el contacto con jóvenes delincuentes incrementan el riesgo delictivo. Propone que dificultades intelectuales generan fracaso escolar, pobre desarrollo de empatía y razonamiento ético, facilitando la conducta delictiva.
Para Wilson y Herrnstein, la criminalidad es el resultado de un proceso racional de elección, donde el individuo sopesa los costes y beneficios del delito.