Portada » Economía » Fundamentos de la Estructura Empresarial: Clasificación, Financiación y Resultados Financieros
Para lograr estos objetivos, las empresas deben realizar inversiones, es decir, adquirir capital. Para adquirir capital necesitan financiación, que pueden conseguir de entidades financieras (bancos, accionistas, etc.).
Las empresas se clasifican atendiendo a diversos criterios:
Sus socios responden con su patrimonio personal de las deudas de la sociedad. Dentro de ellas están:
Son las sociedades donde la responsabilidad de los socios se limita al capital que aportan a la sociedad. Son las sociedades de capital y las sociedades de interés social.
El capital de estas sociedades lo forman las aportaciones de los socios de la empresa. La responsabilidad de los socios se limita a sus aportaciones. En estas sociedades los socios tienen derechos económicos (reciben beneficios en proporción al capital que aportan) y políticos (votan en la Junta General). Estas sociedades tienen dos órganos que las gobiernan:
El capital se divide en participaciones, de las que son propietarios los socios. Cualquier compraventa de participaciones se hace ante notario. Como los socios suelen ser los mismos, es una sociedad típica de pequeñas y medianas empresas. Sus siglas son S.L.
El capital se divide en acciones, que se pueden comprar y vender libremente. La parte que cada acción tiene del capital se llama valor nominal. El valor que alcanzan las acciones en la Bolsa (mercado de compraventa de acciones) se llama valor de cotización y se expresa en porcentaje respecto al valor nominal. Las siglas de la sociedad anónima son S.A.
Una cooperativa es una agrupación de personas que se asocian con un fin social para crear una empresa y trabajar en ella. Los cooperativistas aportan el capital de la empresa. Sus órganos de gobierno son:
Al crearse, el principal recurso financiero de una empresa es su capital inicial que aportan los socios. Durante la vida de la empresa se pueden hacer ampliaciones de capital, que aportan más recursos financieros. En las sociedades anónimas, las ampliaciones de capital se hacen vendiendo nuevas acciones. Los accionistas antiguos tienen preferencia en comprar las nuevas acciones.
Las reservas son los beneficios que la empresa retiene y no reparte entre los socios. La ventaja es que ahorra gastos financieros: no hay que pagar intereses ni dar dividendos a nuevos accionistas. Muchas pequeñas y medianas empresas se financian así. Sus desventajas son que se obtienen pocos recursos y que reducen los dividendos (la parte de los beneficios que se reparte entre los socios).
Son las deudas que se amortizan (se pagan) en un plazo superior al año. Hay varios tipos:
Además de créditos y préstamos a corto plazo, y de las obligaciones y bonos que se amortizan antes del año, hay otros tipos de financiación a corto plazo:
El resultado de las empresas es la diferencia entre los ingresos y los gastos generados por su actividad. Los ingresos provienen de las ventas de los productos fabricados o los servicios proporcionados por la empresa. Los gastos son el coste de los recursos usados para la producción y la financiación de la empresa. La cuenta de resultados registra los ingresos y gastos de una empresa en un determinado periodo de tiempo.
Hay dos tipos de resultados. La suma de ambos da el resultado total:
Si el resultado total es positivo, la empresa obtiene beneficios; si es negativo, la empresa incurre en pérdidas. Si la empresa tiene beneficios, debe pagar el impuesto de sociedades.
