Portada » Biología » Fundamentos de Biología: Homeostasis, Estructura Celular y Ciclo de Vida
La cavidad abdominal se divide convencionalmente en nueve regiones para facilitar la localización de los órganos:
La Homeostasis es el estado de equilibrio interno en el que se mantiene el cuerpo, compensando los cambios de su entorno (externo e interno) mediante mecanismos de regulación.
Para que ocurra la homeostasis, existen sensores que detectan las oscilaciones de los parámetros y envían la información al centro de integración. Esta capacidad de detección depende del punto de ajuste, que marca una medida ideal para cada parámetro (ej. la temperatura corporal, entre 35 °C y 37 °C).
La señal (desequilibrio) es captada por un receptor y enviada por una vía aferente al centro de integración, donde se detecta el cambio en los parámetros normales. Desde allí, la respuesta viaja por una vía eferente hasta el órgano efector, que la ejecuta.
El centro de integración se encuentra en el cerebro, la médula espinal o en un grupo de células de una glándula secretora. Cuando recibe información de un sensor sobre una oscilación en un punto de ajuste, elabora una respuesta (atenuadora o intensificadora) para restablecer el equilibrio interno. Estas respuestas se realizan mediante dos mecanismos antagónicos:
La Membrana Plasmática, también denominada membrana celular, es una estructura semipermeable que separa el interior de la célula del exterior.
Su organización se describe mediante el Modelo de Mosaico Fluido (propuesto por Singer y Nicolson en 1972). Es una estructura asimétrica formada por proteínas, lípidos e hidratos de carbono, organizada de manera estable en una bicapa lipídica. Mantiene el equilibrio entre el medio intracelular y el medio extracelular.
Los fosfolípidos forman una doble capa fluida con los grupos apolares (hidrófobos) en el interior y los grupos polares (hidrófilos) en el exterior, en contacto con la fase acuosa.
Son moléculas globulares parcialmente incluidas y sobresalientes en la membrana. Son anfipáticas (poseen regiones hidrofílicas e hidrofóbicas).
El medio extracelular e intracelular es acuoso. Los lípidos se organizan formando la bicapa lipídica.
Se unen a la membrana a través de proteínas (glucoproteínas) o lípidos (glucolípidos), formando el Glucocálix: una cubierta de polisacáridos situada en la cara externa de la membrana.
La reproducción celular es el proceso de división por el que una célula madre da lugar a dos células hijas idénticas (proceso de mitosis).
Para que la mitosis pueda ocurrir, la célula debe pasar por una fase de preparación: la Interfase. Durante el ciclo celular, la célula aumenta su tamaño y duplica sus orgánulos e información genética antes de entrar en la fase M (mitosis).
Es el período entre dos mitosis. El núcleo no cambia morfológicamente, pero sí a nivel metabólico. El tamaño celular se duplica, y se duplica el número de enzimas, ribosomas, mitocondrias y otras moléculas. Algunas estructuras celulares, como los microtúbulos o microfilamentos, se sintetizan.
Punto de Control: Si la célula no cumple los requisitos para la división, pasa a la etapa G0 o se le induce la apoptosis (muerte celular programada).
Si todos los procesos de la interfase transcurren correctamente, la célula entra en división celular. Es necesario que la secuencia de eventos sea apropiada y que los eventos ocurran una sola vez.
Los Linfocitos son las células responsables de la inmunidad adaptativa (linfocitos B y T). Expresan en su superficie receptores específicos para el antígeno.
Cada linfocito tiene una sola clase de receptor con especificidad única. Una característica fundamental es que poseen memoria inmunológica.
