Portada » Historia » Cronología y Conceptos Esenciales de la Segunda Guerra Mundial
Los tratados de paz de la Primera Guerra Mundial impusieron a los países vencidos onerosas deudas y severas condiciones, generando un profundo clima de resentimiento, especialmente en Alemania. Por otro lado, en los países europeos surgió un auge de nacionalismos extremistas como reacción al triunfo del comunismo en la Revolución Rusa (octubre de 1917). Además, la Gran Depresión de los años treinta sumió a muchas naciones en una terrible crisis económica. Las soluciones extremas (como el comunismo o el fascismo/nazismo) se presentaban como únicas salidas, debilitando la democracia y la Sociedad de Naciones, y permitiendo el desarrollo de políticas expansionistas y de rearme.
Los regímenes fascistas practicaron agresivas políticas expansionistas, y en los años treinta se sucedieron importantes hitos. Japón ocupó militarmente Manchuria en 1931. Italia invadió Etiopía en 1935 e intervino, junto a Alemania, en la Guerra Civil Española. Alemania inició un proceso de expansión por Europa, y las potencias europeas, bajo una política de apaciguamiento, aceptaron sus exigencias para evitar una nueva guerra. En 1938, invadió Austria y los Sudetes. En la Conferencia de Múnich de 1938, Francia, Gran Bretaña e Italia entregaron a Hitler toda Checoslovaquia, que fue anexionada en marzo de 1939. En 1936, Alemania e Italia forjaron la alianza conocida como el Eje Berlín-Roma, y Alemania firmó con Japón el Pacto Antikomintern, al que luego se sumó Italia.
El detonante de la guerra fue la invasión de Polonia, territorio que Hitler ambicionaba, pero cuya independencia era apoyada por Francia y Gran Bretaña. En 1939, Alemania firmó con la URSS un pacto secreto de no agresión para repartirse Polonia, con el que Hitler quería asegurarse la neutralidad soviética en caso de conflicto. El 1 de septiembre de 1939, Alemania invadió Polonia, y en respuesta, Francia y el Reino Unido declararon la guerra a Alemania, dando inicio así a la Segunda Guerra Mundial.
El Holocausto fue el exterminio premeditado, planificado y sistemático de las comunidades judías en Europa, perpetrado por el régimen de Hitler a partir de 1933. También afectó a otros colectivos, como los gitanos (Roma) y los homosexuales. Este proceso atravesó distintas fases: la exclusión (1933-1939), la reclusión en guetos (1939-1940) y el exterminio masivo (1941-1945).
En 1935, el Reich dictó las Leyes de Núremberg, que excluyeron a los judíos de la ciudadanía alemana y prohibieron los matrimonios mixtos. En 1938, se produjo en Alemania y Austria la «Noche de los Cristales Rotos» (Kristallnacht), un pogromo en el que se saquearon sinagogas, viviendas y establecimientos judíos, y muchos fueron enviados a los primeros campos de concentración. En 1939, con la invasión de Polonia, las autoridades nazis crearon guetos, barrios donde se obligaba a la población judía a concentrarse en condiciones extremas de pobreza y hacinamiento. En 1941, se inició la fase más brutal del genocidio con la Solución Final, que implicó el exterminio masivo de judíos en cámaras de gas de los campos de exterminio; en Auschwitz-Birkenau, por ejemplo, se asesinó a más de un millón de judíos y a unos tres mil gitanos. En 1945, con el fin de la guerra, los Aliados liberaron a los prisioneros de estos campos, revelando al mundo la magnitud de los horrores cometidos.
Los Aliados se reunieron para definir la estrategia de una paz duradera:
En 1945, se redactó la Carta Fundacional de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con cuatro objetivos principales: el mantenimiento de la paz y la seguridad internacional, el derecho a la libre determinación de los pueblos, la defensa de los derechos humanos universales y la cooperación pacífica entre las naciones. Se crearon organismos especializados como la FAO, la OMS, la UNESCO y la OIT.