Portada » Historia » Conflictos Bélicos del Siglo XX: Guerra Civil Española y Segunda Guerra Mundial
El golpe militar de 1936 no logró un triunfo inmediato como ocurrió en pronunciamientos anteriores, sino que dio lugar a la Guerra Civil, la cual dividió el país en dos grandes zonas con ideologías, apoyos sociales, estructuras políticas y modelos económicos completamente opuestos. Esto marcó una profunda y violenta etapa en la historia de España.
Defendía la legalidad de la Segunda República y se oponía al fascismo.
Se vivió una revolución social con la colectivización de tierras y fábricas.
Se intentó organizar un ejército regular y centralizar el poder en el gobierno de Negrín. Recibió ayudas de la URSS y voluntarios de las Brigadas Internacionales.
Consideraban el golpe una cruzada contra el comunismo y el desorden.
Franco asumió el poder total como Jefe del Estado y Generalísimo. Se instauró una dictadura militar y nacional-católica con un único partido. Recibió ayuda militar decisiva de la Alemania nazi, la Italia fascista y Portugal.
Durante los años 30, el orden establecido tras la Primera Guerra Mundial comenzó a desmoronarse, dando paso a condiciones que facilitaron el estallido de la Segunda Guerra Mundial:
Entre 1939 y 1941, el Eje logró una rápida expansión. Alemania invadió Polonia en 1939, lo que provocó la entrada en la guerra de Francia y el Reino Unido. En 1940, invadió Bélgica, Países Bajos, Francia, Dinamarca y Noruega. En 1941, atacó a la URSS, rompiéndose el acuerdo germano-soviético e iniciando la Operación Barbarroja.
En el Mediterráneo, Italia falló en su invasión a Grecia, y Alemania intervino, ocupando Grecia y Yugoslavia. También avanzaron en el Norte de África, desde Lisboa hasta Egipto, poniendo en peligro el Canal de Suez. En Asia, Japón ocupó colonias europeas y atacó Pearl Harbor, lo que llevó a la entrada de Estados Unidos en la guerra.
A partir de 1943, comenzó la contraofensiva aliada. En el frente oriental, la resistencia soviética frenó a los nazis en la Batalla de Stalingrado (1943-1944), marcando un giro en la guerra. En el Mediterráneo, los Aliados derrotaron a las tropas del Eje en El Alamein y desembarcaron en el Norte de África. En 1943, invadieron Sicilia y liberaron el sur de Italia. Mussolini fue derrocado, aunque los nazis instauraron la República de Saló en el norte. La entrada de EE. UU. fue clave para cambiar el rumbo del conflicto a favor de los Aliados.
Entre 1944 y 1945, los Aliados derrotaron a Alemania y Japón.
Japón se rindió en agosto de 1945, dando así fin a la Segunda Guerra Mundial.
Durante la Segunda Guerra Mundial, las potencias aliadas celebraron varias conferencias clave que definieron el nuevo orden mundial y anticiparon la división del mundo en bloques.