Portada » Lengua y literatura » El Ensayo y la Evolución de la Novela Española del 98 al Novecentismo
El DRAE define el ensayo como “escrito, generalmente breve, constituido por pensamientos del autor sobre un tema, sin el aparato ni la extensión que requiere un tratado completo sobre la misma materia”.
El ensayo es un género **híbrido**, mezcla de lo **literario** y lo **discursivo**. Del ámbito científico toma los temas y el atenerse a los hechos, vinculado a la reflexión sobre la realidad. De la literatura toma la forma de expresión. La parte científica del ensayo ha hecho que muchos manuales de historia literaria lo obvien, pero nadie puede dudar de clasificar como literaria la obra discursiva de autores como Unamuno u Ortega.
En la historia del ensayo destaca el género ensayístico. En España, el género aparece con antecedentes en el siglo XVI (Fray Antonio de Guevara) y en el siglo XVII (Francisco Cascales con Cartas filosóficas y Juan Zabaleta con Errores celebrados). A principios del siglo XVIII, destaca el Teatro Crítico Universal.
El género solo toma la denominación propia de ensayo a mediados del siglo XIX, y solo la **Generación del 98** y sus sucesores empiezan a escribir ensayos propiamente dichos.
La estructura intenta mostrar con claridad las ideas expuestas. El autor se puede valer del uso de **figuras retóricas**.
La exposición o desarrollo puede seguir dos métodos:
La novela del 98 está influida por el **Desastre del 98** y el auge del **irracionalismo europeo**, dando gran importancia a la **intimidad**. Son **novelas de interior**, caracterizadas por el desprecio por lo anecdótico.
El cambio de concepto de la novela, desde Galdós hasta el 98, se produce lentamente. Esta evolución comienza con Los trabajos de Pío Cid, obra donde se formaron muchos rasgos de la narrativa posterior de Azorín o Baroja.
Su obra se sitúa entre el ensayo y la narrativa. Destaca el **detallismo** y la **microhistoria**. Su prosa es sencilla y precisa, muy descriptiva, con poco hilo narrativo.
Obras destacadas: La Voluntad y Antonio Azorín.
Fue Catedrático de griego en Salamanca. Vivió una **pugna interior** entre **fe y escepticismo**. Escribió principalmente novelas y ensayos.
Su primera novela importante fue Amor y pedagogía, que trataba temas como el **problema de España** o el sentido de la vida humana.
La **inmortalidad** es la cuestión central de su obra, de ahí su concepto de “**hambre de Dios**”, la necesidad de un dios “garantizador de nuestra inmortalidad humana”. Sin embargo, su razón le niega la esperanza.
También trata problemas de personalidad, como la inmortalidad en la fe (San Manuel Bueno, Mártir) o la envidia (Abel Sánchez).
Autor vasco y gran novelista del 98. Concibe la novela como un **género abierto**, espontáneo y sin convenciones.
Características:
Esta forma de novela abierta hace que Baroja agrupe sus obras en **trilogías** (ej. La raza).
Más conocido por su teatro y el **esperpento**. Su obra tiene un corte **modernista** y **primitivista** (ej. Las Sonatas).
El **Novecentismo** surge en 1914. Sus miembros son **intelectuales** con gran formación (críticos, historiadores y profesores). Por ello, los géneros más cultivados son el **ensayo** y la **novela**.
Se caracteriza por el predominio del **elemento intelectual** unido con **humor e ironía**. Destaca su **preocupación por España** y un concepto amargo del mundo. Su obra se divide en tres etapas:
Destaca el cultivo de las **sensaciones**, el **dominio del lenguaje** y la **descripción**. Ejemplo: El obispo leproso.
En conclusión, la novela hasta 1939 se opone a la copia de la realidad y al **barroquismo del realismo decimonónico**. Las principales corrientes se definen así:
