Portada » Geografía » Recursos Hídricos y Bienes Comunes en Argentina: Desafíos Ambientales y Marco Legal
Estos bienes esenciales —el aire de la atmósfera, el agua de la hidrosfera y el suelo de la litosfera— forman parte de un único ecosistema y pertenecen a todos los habitantes del planeta.
La vida depende del aire de la atmósfera por el oxígeno que contiene. Es un recurso de uso libre, pero muchas actividades humanas ocasionan problemas ambientales que representan una amenaza para la salud de sus habitantes.
El agua es esencial para la vida, sirviendo como vía navegable, fuente de energía, alimentación y recreación. Los principales problemas asociados son:
El suelo es la parte superficial de la corteza terrestre, con espesor variable, y es fundamental para la producción de alimentos. Los problemas que enfrenta incluyen:
Frente a las problemáticas argentinas, se ha intensificado la participación en organizaciones no gubernamentales (ONG) ambientalistas o ecologistas, tanto nacionales como internacionales, tales como Greenpeace y Fundación Vida Silvestre.
Nuestra vida depende del agua, un recurso cada vez más escaso y valioso, siendo un insumo importante para la producción de diversos productos. Este derecho está respaldado por:
Los glaciares son la mayor reserva de agua dulce de la Tierra y generan importantes ingresos como atractivos turísticos. Son una forma de compactación, acumulación y recristalización de la nieve que se desplaza por el terreno.
En la Cordillera de los Andes se presentan los principales glaciares, destacándose el Viedma, el Perito Moreno y el Upsala.
En Argentina se dictó la Ley 26.639, que establece la necesidad de preservarlos como recurso hídrico para el consumo humano. La ley prohíbe la actividad arquitectónica (con excepción de la necesaria para la investigación científica) y la dispersión de residuos contaminantes, entre otras restricciones.
El suelo es la parte superficial de la corteza terrestre y tiene espesor variable. Está constituido por elementos minerales y orgánicos en descomposición, aire, agua y organismos vivos.
En Argentina se encuentran numerosos tipos de suelos, utilizados principalmente para la agricultura. En las últimas décadas, debido a la mayor demanda de alimentos, se produjo el proceso de agriculturización en busca de provecho a corto plazo. Este enfoque ha deteriorado las tierras y provocado su degradación.
Los ríos y las aguas subterráneas son de uso libre. El Gobierno Nacional creó AYSA (Agua y Saneamientos Argentinos), una sociedad anónima que pertenece en un 90% al Estado y en un 10% a sus empleados. AYSA extrae agua del Río de la Plata para abastecer a aproximadamente 10 millones de habitantes. En las últimas décadas se ha tomado conciencia de la escasez hídrica, por lo que es necesario elaborar políticas coherentes de recursos hídricos.
Argentina posee aguas dulces en forma líquida (ríos, lagos, lagunas y acuíferos) y en estado sólido (como el Campo de Hielo Patagónico y los glaciares).
El acceso al agua potable se ve dificultado, ya que gran parte de la población consume agua de pozo que no siempre es de buena calidad, pudiendo estar contaminada y ser transmisora de diferentes enfermedades.
El 75% del territorio nacional son tierras secas, abarcando desde el Nordeste Argentino hasta las mesetas patagónicas.
Se refiere a la cantidad excesiva de agua en ciertos meses o años e insuficiente en otros. En nuestro país se presentan grandes inundaciones y sequías.
Las aguas subterráneas en algunas áreas son de baja calidad por la presencia de minerales nocivos como arsénico y flúor.
Afecta a capas superficiales y subterráneas a causa de:
Es fundamental tomar conciencia del derroche de agua generado por numerosas causas.
De ellas depende la provisión de agua potable y el desarrollo regional. En general, poseen buenas condiciones de potabilidad debido a la acción depuradora que ejerce el suelo. Generalmente se usan de forma directa para el consumo humano, con excepción de algunos acuíferos costeros por su elevado nivel de sales disueltas. Se originan por la infiltración de aguas provenientes de lluvias, ríos, lagos y fusión de la nieve a través de rocas, formando depósitos subterráneos.
Es uno de los más importantes de Argentina por su caudal, su fácil acceso y la calidad del agua. Abarca zonas de Santa Fe, el este de Córdoba y el noreste de Buenos Aires.
Es el mayor reservorio de agua mineral de América y uno de los más grandes del mundo, compartido con Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina. Es utilizado para abastecer a la población, a las industrias y para la irrigación. Dichos países trabajan en proyectos para su protección y manejo sustentable.
