Portada » Biología » Sistema Circulatorio Humano: Anatomía, Fisiología y Salud Cardiovascular
El sistema circulatorio es una red vital encargada de transportar sustancias esenciales por todo el cuerpo. Sus componentes principales son:
Sus principales funciones son el transporte de nutrientes, oxígeno, hormonas y productos de desecho, la regulación de la temperatura corporal y el pH, y la protección del organismo frente a lesiones e infecciones.
La función primordial del corazón es contraerse y relajarse rítmicamente para bombear la sangre. Se divide en cuatro cavidades:
El corazón realiza dos tipos de movimientos:
Estos movimientos suceden rítmicamente y determinan la frecuencia cardíaca, asegurando la circulación de la sangre por todo el cuerpo. Cada lado del corazón posee dos válvulas, cuya función es evitar el retroceso de la sangre:
El corazón de los mamíferos es tetracameral, es decir, posee dos ventrículos y dos aurículas.
El impulso cardíaco nace en el nódulo sinoauricular, más conocido como el marcapasos natural del corazón, que se encuentra en la aurícula derecha (AD). Este determina la frecuencia con la que se generan los impulsos, estableciendo el ritmo cardíaco normal (aproximadamente 80 latidos por minuto).
La regulación del latido cardíaco se produce de tres formas principales:
Algunas de las patologías más comunes que afectan al sistema circulatorio incluyen:
La circulación doble describe el recorrido completo de la sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y plasma) por todo el sistema circulatorio, pasando dos veces por el corazón. Se compone de:
Transporta la sangre desoxigenada desde el corazón hacia los pulmones para que elimine el dióxido de carbono (CO2) y se cargue de oxígeno (O2).
Lleva la sangre oxigenada desde el corazón a todos los tejidos y órganos del cuerpo.
La sangre es un tejido conectivo líquido con múltiples funciones vitales: transportar oxígeno y nutrientes, eliminar desechos, regular el pH y la temperatura corporal, y proteger el organismo mediante la coagulación y la respuesta inmune. Su estado líquido se debe a su componente principal, el plasma.
Plasma: Es un líquido de color amarillento que constituye aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo. Es el medio de transporte para nutrientes, hormonas, proteínas y productos de desecho, y en él se encuentran suspendidas las células sanguíneas (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas).