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La medición de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) es una tarea fundamental para conocer el grado de cumplimiento de los objetivos empresariales. Por esta razón, han emergido y cobrado relevancia diversas normas y estándares internacionales.
La norma SA8000 actúa para implementar la sostenibilidad social en relación con los empleados; es un estándar global que establece requisitos verificables para que una organización asegure condiciones laborales socialmente responsables. Estos requisitos se basan en convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Declaración Universal de los Derechos Humanos y otros marcos internacionales de derechos laborales. La norma cubre aspectos fundamentales como:
La ISO (Organización Internacional de Normalización) es una federación mundial de organismos nacionales de normalización. La norma ISO 26000 ha sido preparada por el Grupo de Trabajo sobre Responsabilidad Social de la ISO. Esta norma internacional se ha desarrollado con la participación de expertos de más de 90 países y 40 organizaciones internacionales o regionales representativas.
La ISO 26000 es una norma internacional que orienta a las organizaciones en la adopción de prácticas de responsabilidad social en sus operaciones diarias. A diferencia de otras normas ISO, la ISO 26000 no es certificable, pues parte de la voluntariedad de las organizaciones para aplicar sus principios y recomendaciones. Esta norma se estructura en torno a siete temas principales y es útil para cualquier tipo de organización, ya sea del sector privado, público o no gubernamental, sin importar su tamaño o el país en el que opere.
Forética es una asociación española de empresas y profesionales dedicada a la Responsabilidad Social, cuya misión es promover una cultura de Gestión Ética y Responsabilidad Social. Ofrece a las organizaciones conocimientos y herramientas que les permitan desarrollar modelos de negocio competitivos y sostenibles. Se creó en Barcelona en el año 2000.
La SGE21 es un estándar que se basa en el análisis Ambiental, Social y de Buen Gobierno (ASG). La norma se centra en la comunicación y gestión de los grupos de interés (stakeholders), abarcando nueve áreas clave de toda organización. Posee una doble verificación y está dividida en capítulos estructurados según los grupos de interés. Sus principales ventajas son:
Las corrientes filosóficas nos ayudan a tomar decisiones estratégicas y éticas:
Para implementar estos valores, las empresas utilizan diversas herramientas:
Manuel Fernández de Sousa, presidente de Pescanova, junto con otros directivos, infló las cuentas de la empresa y ocultó su verdadera deuda para obtener financiación. La empresa entró en concurso de acreedores, generando pérdidas masivas a accionistas y acreedores. Fernández de Sousa fue condenado a varios años de prisión. «Pescanova demostró cómo la falta de independencia del consejo y los conflictos de interés pueden desencadenar graves crisis empresariales» (Audiencia Nacional, 2020).
De cara al público, existen certificados que ayudan a mejorar la percepción de marca, aunque no siempre son requisitos legales. No son necesariamente modelos de gestión interna, sino que demuestran que la empresa realiza prácticas sostenibles. Se utilizan en el packaging como una estrategia de marketing y pueden ser un factor decisivo en la compra, facilitando la relación con los stakeholders.
Los informes de sostenibilidad se pueden redactar siguiendo distintas normativas, siendo la más común el GRI (Global Reporting Initiative). El GRI es una organización internacional que proporciona un marco de referencia globalmente aceptado para la elaboración de memorias de sostenibilidad.
En el contexto de un informe, el GRI ofrece estándares que ayudan a comunicar de manera transparente el desempeño en áreas clave: medio ambiente, sociedad y economía. Su función no es gestionar o implementar, sino comunicar e informar. Los estándares GRI permiten que las empresas:
El organigrama de los órganos de gobierno es fundamental para la transparencia y el control:
El concepto de compliance se refiere al conjunto de procedimientos y controles internos destinados a garantizar que una empresa cumpla con las leyes, regulaciones y normas éticas aplicables. Un programa de compliance eficaz incluye herramientas de auditoría, formación de empleados, códigos de conducta y canales de denuncia para identificar y prevenir irregularidades. En el ámbito de la RSE, el compliance asegura que la empresa no solo cumpla con la legalidad, sino que adopte las mejores prácticas en ética empresarial y responsabilidad ambiental.
