Portada » Magisterio » Paradigmas Educativos: Un Recorrido por el Conductismo, Constructivismo y la Construcción Curricular
Conductismo |
Constructivismo |
Autores: Watson, Pavlov, Skinner. |
Autores: Piaget, Vigotsky, Bruner, Ausubel. |
Aprendizaje: Como resultado de la asociación que se produce por la intervención del refuerzo Estímulo-Respuesta. |
Aprendizaje: Como resultado de un proceso de construcción y reconstrucción de significados. |
Aprender: Es lograr cambios observables y medibles de la conducta. |
Aprender: Es lograr modificar y enriquecer esquemas de pensamiento preexistentes. |
Alumno: Es una caja negra, biológica, pasiva que responde a estímulos. |
Alumno: Construye su conocimiento, lo va generando, partiendo de estructuras cognitivas más simples a otras más complejas. |
Modelo: Aplicado a mediados del siglo XX. |
Modelo: Aplicado desde fines del siglo XX. |
Currículum: Como plan de instrucción, cerrado y obligatorio, para todo el que aprende por igual. Enseñanza de tipo enciclopedista. |
Currículum: Como proceso y resolución de problemas. Abierto, flexible, sujeto a investigación permanente. Enseñanza basada en situaciones problemáticas. |
Obligación de cumplir con el programa. |
La enseñanza está subordinada al aprendizaje. |
Evaluación: Medición de resultados (el producto como entes evaluables y medibles). |
Evaluación: Continua y permanente de los procesos. |
Rol Docente: Protagónico, conduce, guía, instruye. Entrega el saber. |
Rol Docente: Facilitador, orientador, intermediario en el proceso. Comparte el saber. El alumno es protagonista. |
Rol Alumno: Pasivo, mero receptor del saber. |
Rol Alumno: Protagonista. Constructor activo de su propio aprendizaje. |
El conflicto cognitivo surge cuando las ideas preexistentes de un individuo chocan con una nueva situación, desafiando su estructura de conocimiento. El individuo intenta resolver la situación con sus conocimientos previos, pero si estas estructuras no son suficientes, la situación se resiste a ser comprendida o resuelta.
Primero, se produce una perturbación al no poder resolver el problema con la estructura cognitiva existente. Luego, se inicia una reelaboración de la estructura interna, un proceso que busca equilibrar esta estructura de conocimiento, construyendo nuevos aprendizajes para resolver la situación. La interacción con otros, al construir colectivamente y considerar distintas opiniones, es otro factor crucial para la elaboración del desarrollo cognitivo. La mediación de un ‘otro’ (ya sea el docente o los pares) facilita que el sujeto adquiera ese conocimiento potencial, conduciendo a un conocimiento más profundo.
En contraposición con las teorías conductistas, el error, visto desde esta perspectiva, permite descubrir las dificultades que enfrenta el alumno. No se trata de señalar una falta, sino de identificarla para poder modificarla. No se trata de suprimirlo, anularlo o hacer que nunca existió, sino de revisarlo y reflexionar sobre él. Se busca retrabajar sobre ese error. Actualmente, la elaboración de saberes implica un enfoque diferente.
El error se analiza y se adapta a las posibilidades cognitivas del niño, según su edad. No es adecuado decirle al niño que todo está bien solo por su edad. Es necesario señalar sus confusiones, pero guiándolo a la reflexión mediante preguntas para que llegue a sus propias conclusiones. Se debe valorizar el error como una oportunidad de aprendizaje.
El cuerpo de conocimiento constituye el plan de estudios, definiendo qué se debe enseñar y el saber a transmitir. El foco principal está en el saber y el conocimiento, sin preocuparse tanto por los objetivos, el contexto social o la metodología.
El educador debe adoptar un modelo de fábrica, organizando el currículum con metas y objetivos claros. Este enfoque es de tipo TECNICISTA.
El currículum no se limita a contenidos, sino que incluye métodos de enseñanza, estrategias y objetivos. Es un enfoque más general y representa un avance respecto a los anteriores, al incorporar la organización de la experiencia y la evaluación, siendo más integral.
Se concibe como un proceso permanente de construcción, donde importan los intereses del niño. Los modelos de práctica (sugerencias de propuestas y actividades) sirven como referencia o guía a tener en cuenta.
Reconoce que la escuela reproduce las características de la sociedad (si algo ocurre en la sociedad, también se refleja en la escuela; no es una burbuja aislada, sino que se ve afectada por el entorno).
Conjunto de influencias formativas que se producen en la escuela pero no están explicitadas ni formalmente reconocidas (ejemplos: la gestión de situaciones como el dengue, los piojos o el consumo de drogas por parte de los alumnos; son prácticas instaladas pero no figuran en ningún diseño curricular). A menudo, no conviene explicitar ciertas cuestiones en el currículum oficial, ya que su formalización podría generar implicaciones políticas o una percepción negativa. Es como ‘esconder el polvo debajo de la alfombra’ para mantener una imagen de limpieza.
Implica la selección de contenidos desde una perspectiva social, considerando el ‘qué’ y el ‘cómo’ enseñar a un grupo específico con características sociales particulares. Esto se debe a que la enseñanza y los contenidos no son los mismos en una escuela de un contexto determinado que en otra de un contexto totalmente distinto.
No es una única persona quien elabora el currículum, sino toda una comunidad que participa en este proceso, incluyendo padres, docentes, expertos, entre otros. No surge de un escritorio cerrado de un director, sino que se construye en distintos espacios y reuniones. Se organizan jornadas, por ejemplo. Esta concepción tiene en cuenta los problemas que surgen de la práctica misma y considera la evaluación constante.