Portada » Psicología y Sociología » Modelos de Comprensión Lectora: Procesamiento Lineal e Interactivo
Enfatizando los procesos de memoria de corto plazo. Los paradigmas del fonocentrismo se encuadran en el modelo lineal, ya que se enfatiza la lectura letra a letra, sílaba a sílaba, palabra a palabra, y se posterga la integración semántica de los significados textuales. El énfasis se pone en la transferencia de información lograda a través de la lectura; el lector debe identificar los significados del texto y almacenarlos en su memoria. Se le asigna gran importancia al proceso de percepción y memorización de los datos del texto escrito.
El modelo lingüístico que subyace a estos modelos es estructuralista y el modelo psicológico es asociacionista. Tales modelos tienen una orientación conductista. Los modelos de comprensión del texto escrito eran modelos de reconocimiento y almacenamiento de la verbalización palabra a palabra producida por el lector. En lo que se refiere al texto oral, la conversación dialógica cara a cara ha sido considerada como la variedad lingüística típica de la oralidad. El texto argumentativo académico sería el prototipo del lenguaje escrito.
Estos modelos provienen de la teoría del procesamiento de la información. A continuación, se presentan dos modelos de esta tendencia:
Pretende explicar la secuencia de mecanismos y procesos que realiza un lector desde que percibe los estímulos visuales escritos hasta que los codifica oralmente y logra llegar a la fase de lectura oral. Con la primera fijación ocular se produce en la retina una representación directa llamada icono que permanece hasta que se produce un segundo icono como resultado de una segunda fijación (en milisegundos por letra). Las letras se asocian a fonemas y se produce una representación fonética del estímulo visual que se transfiere a la memoria léxica.
Modelo de automaticidad en el que se destaca la atención y la automatización. Tiene 3 componentes centrales:
La psicolingüística tiene variadas orientaciones. Presenta una marcada preocupación por el discurso y su procesamiento cognitivo, no restringido a una postura radical innata.
En los años 60, Goodman y Smith realizaron importantes estudios en el ámbito de la lectura. Goodman señaló que los errores de los lectores mientras leen oralmente no deben considerarse problemas, sino una valiosa fuente de información que ofrece una visión sobre los procesos internos de comprensión del texto escrito. Sostuvo que el lector es un explorador y constructor en busca del significado y, para ello, utilizará todos los recursos disponibles. En la comprensión de una palabra, los contextos lingüísticos y semánticos desempeñan un papel importante. En la tarea de construir un significado textual, el lector utiliza tres sistemas de claves: sintácticas, semánticas y grafo-fonémicas.
Smith, por su parte, destaca que cada sujeto que aprende a leer lo hace por formar parte de una comunidad letrada. Aboga por una enseñanza más global e integrada en la que el sujeto aprenda a leer como parte de un crecimiento social. Sostiene que la lectura opera basada en predicciones informadas a partir de la información no visual o conocimiento previo. Postula que la comprensión del texto es un proceso predictivo y de toma de decisiones en el que el sujeto trabaja activamente en la construcción del significado, a partir de la información visual, pero atendiendo a conocimientos previos disponibles.
Esta teoría apunta al almacenamiento de conceptos más o menos abstractos sobre eventos, acciones o rutinas. Apunta a un procesamiento descendente en el que el conocimiento previo, para dar coherencia al constructo escrito, estaría estructurado en la mente. Así, el reconocimiento de lo escrito basta para activar un conjunto de conocimientos interrelacionados. Estos paquetes de información han recibido varios nombres: marco (frame), libreto (script), esquema (usado por Piaget).
Un esquema es: “una estructura representativa de los conceptos genéricos almacenados en la memoria del sujeto… Equivale a un tipo de organización de información prototípica que se elabora y almacena a lo largo de la vida” (Parodi). Los esquemas son entidades complejas compuestas por unidades más simples que se pueden engarzar entre sí. Ejemplo: “ir de compras” incluye:
Según esta teoría, la comprensión es un proceso interactivo entre los esquemas de conocimiento del lector y la información del texto. Cuando un sujeto lee, debe utilizar todos los recursos disponibles: los datos del texto y la activación en su memoria le proporciona la información necesaria (modelo interactivo de lectura). Lo que el lector ve en el texto y los conocimientos que él aporta son procesos simultáneos e interdependientes. La comprensión de un texto depende de la necesaria posesión de estructuras de conocimiento pertinente que se van ampliando y reelaborando en el acto de comprensión para lograr una adecuada interpretación textual.
Los esquemas de conocimiento que cada persona posee le permiten interpretar, contrastar y analizar gran parte de la información presentada. Este conjunto de saberes constituye la “visión del mundo”, el “mundo posible” o el “modelo mental”. Estos esquemas son la base que permite recibir nueva información e interpretarla.