Portada » Economía » Mejora Continua en la Gestión Empresarial: Principios y Aplicación del Modelo Deming para la Productividad y Calidad
Mejorar: Adelantar, acrecentar algo, haciéndolo pasar a un estado mejor. (Fuente: RAE)
Para efectos docentes de esta asignatura, la Mejora se define como: la creación organizada de un cambio beneficioso.
La Mejora Continua es una actividad recurrente para aumentar la capacidad de cumplir los requisitos. (Fuente: ISO 9000:2005, 3.2.13).
Cuando el mejoramiento se concentra en un área específica de la organización, se pierde la perspectiva de la interdependencia entre todos los miembros de la empresa. Requiere un cambio en toda la organización, ya que para obtener éxito es necesaria la participación de todos sus integrantes y a todo nivel. Dado que los gerentes en la pequeña y mediana empresa suelen ser muy conservadores, el mejoramiento continuo puede convertirse en un proceso muy largo y requerir inversiones importantes.
«El Cliente es el Rey» (Harrington, 1987).
«En el mercado de los compradores de hoy, el cliente es el rey». Los clientes son el activo más importante en el negocio y, por lo tanto, los empleados deben trabajar en función de satisfacer sus necesidades y deseos.
El proceso de mejoramiento debe comenzar desde los principales directivos y progresa en la medida del grado de compromiso que estos adquieran, es decir, en el interés que pongan por superarse y ser cada día mejores. Está constituido por un grupo de ejecutivos de primer nivel, quienes estudiarán el proceso de mejoramiento productivo y buscarán adaptarlo a las necesidades de la compañía.
El equipo de administración es un conjunto de responsables de la implementación del proceso de mejoramiento. Esto implica la participación activa de todos los ejecutivos y supervisores de la organización. Cada ejecutivo debe participar en un curso de capacitación que le permita conocer nuevos estándares de la compañía y las técnicas de mejoramiento respectivas.
Una vez que el equipo de administradores esté capacitado en el proceso, se darán las condiciones para involucrar a los empleados. Esto lo lleva a cabo el gerente o supervisor de primera línea de cada departamento, quien es responsable de capacitar a sus subordinados, empleando las técnicas que él aprendió.
Es importante desarrollar sistemas que brinden a todos los individuos los medios para que contribuyan, sean medidos y se les reconozcan sus aportes personales en beneficio del mejoramiento.
Toda actividad que se repite es un proceso que puede controlarse. Para ello, se elaboran diagramas de flujo de los procesos, a los que se les incluyen mediciones, controles y bucles de retroalimentación. Para la aplicación de este proceso, se debe contar con un solo individuo responsable de su funcionamiento completo.
Cada compañía debe desarrollar una estrategia de calidad a largo plazo. Posteriormente, debe asegurarse de que todo el grupo administrativo comprenda la estrategia, de manera que sus integrantes puedan elaborar planes a corto plazo detallados que aseguren que las actividades de los grupos coincidan y respalden la estrategia a largo plazo.
Los recursos para el aseguramiento de la calidad, que se dedican a la solución de problemas relacionados con los productos, deben reorientarse hacia el control de los sistemas que ayudan a mejorar las operaciones y así evitar que presenten problemas.
Todo proceso exitoso de mejoramiento debe tomar en cuenta las contribuciones de los proveedores, dado que son parte fundamental del proceso.
Incorporar planes de innovación en pos de la mejora del producto de manera rápida y desarrollar modelos de aseguramiento a largo plazo.
El proceso de mejoramiento pretende cambiar la forma de pensar de las personas acerca de los errores. Para ello, existen dos maneras de reforzar la aplicación de los cambios deseados: castigar a todos los que no logren hacer bien su trabajo todo el tiempo, o premiar a todos los individuos y grupos cuando alcancen una meta o realicen una importante aportación al proceso de mejoramiento.
El Ciclo de Deming, también conocido como ciclo PDCA (Planificar, Hacer, Verificar, Actuar), es una metodología de mejora continua de la calidad.
Según Deming, los bajos costos conducen a una mejora en la productividad, lo que origina un mayor control de mercado y, por lo tanto, mejora la visión de la empresa.
Deming plantea que la gerencia (administradores) y no los trabajadores, son la fuente del aumento de la productividad. ¿Por qué? Dado que la calidad no solo está asociada con productos y servicios, sino también con la forma en que la gente trabaja, cómo son operadas las máquinas y la forma de trabajar con los sistemas.