Portada » Educación Artística » Historia de la Imprenta: Desde los Tipos Móviles hasta la Difusión Global
La **tipografía** es la impresión mediante el uso de piezas de metal independientes, móviles e intercambiables, cada una con una letra grabada. Fue el avance más importante después de la invención de la escritura.
En Europa, diversos factores propiciaron el ambiente que hizo posible su desarrollo. Durante mil años, poco había cambiado el proceso lento y costoso de la elaboración de libros.
La elaboración de papel había completado su larga trayectoria desde China a Europa, lo que aseguró la disponibilidad de un sustrato abundante. Después de que los árabes rechazaran un ataque chino en el año 751 d.C. y capturaran a algunos dedicados a la elaboración de papel, este se propagó a Bagdad y Damasco, hasta Egipto. Luego se extendió por el norte de África hasta España, en el siglo XII.
Los orígenes de la impresión mediante **bloques de madera** en Europa son inciertos, aunque la técnica se había difundido desde Oriente (China) hacia Occidente. La imagen y la inscripción se grababan en el mismo bloque de madera. A principios del siglo XIV, en Europa ya se imprimían diversos diseños.
Las primeras impresiones con bloques de madera fueron imágenes devocionales de santos. Los **«libros de bloques»** eran libros con imágenes de contenido religioso y texto breve grabado en madera. Se utilizaron para la instrucción religiosa de los iletrados.
Estaban impresos por un solo lado. El despliegue de doble página estaba seguido por dos páginas en blanco. Se pegaban juntas para preservar la continuidad visual de las imágenes y el texto. Se imprimían con un sello de mano y tintas de color sepia o grises. Versiones posteriores se imprimieron en una prensa con tinta negra.
Con el desarrollo del papel y la demanda de libros, se hizo necesario experimentar. El holandés **Laurens Janszoon Coster de Haarlem** exploró el concepto de las letras o palabras móviles. Sin embargo, el responsable de desarrollar los complejos sistemas y subsistemas necesarios para imprimir un libro tipográfico fue **Johannes Gutenberg**. Él se propuso ser capaz de producir simultáneamente varias copias de la Biblia en menos de la mitad del tiempo que tardaba el más rápido de los monjes copistas del mundo cristiano en copiar una sola.
En vez de usar tablillas de madera, que se desgastaban con poco uso, Gutenberg confeccionó moldes para cada una de las letras del alfabeto, y posteriormente rellenó estos moldes con una aleación de metal, creando los primeros **tipos móviles**. La invención de la imprenta con caracteres móviles dio la posibilidad de realizar tiradas de múltiples ejemplares de libros, lo que facilitó el acceso de un mayor número de personas en todo el mundo al saber escrito.
Al mismo tiempo y en la misma región donde Gutenberg inventó el tipo móvil, un artista no identificado, conocido como **El Maestro de los Naipes**, creó los primeros grabados conocidos en lámina de cobre.
La imprenta, creada a mediados del siglo XV, ya se había implementado en más de 150 ciudades europeas antes del nuevo siglo. **Innumerables empresas** empezaron a producir libros en diferentes tamaños y tintas. Los pocos pueblos o personajes que se negaban a adaptarse al nuevo invento, por la posible pérdida de empleo de los copistas, tuvieron que adoptarlo como método de impresión, ya que reducía los **costos** y el tiempo de producción.
La **tipografía** es el adelanto más importante de las comunicaciones entre la invención de la escritura y la de las comunicaciones electrónicas masivas del siglo XX.
Hacia el final del periodo de la **Incunabula**, se habían establecido imprentas en toda Europa, pero pocos de estos impresores contribuyeron al desarrollo del diseño gráfico. La innovación en el diseño tuvo lugar en Alemania, donde los artistas **grabadores en madera** e **impresores tipográficos** colaboraron a fin de desarrollar el libro ilustrado y los pliegos sueltos.
Italia, que estuvo a la vanguardia durante la lenta transición de la Europa del mundo medieval a un resurgimiento cultural y comercial, patrocinó el establecimiento de la primera imprenta fuera de Alemania.
El comerciante inglés, **William Caxton** (1421-1491), dejó su tierra natal por Brujas en los Países Bajos, donde prosperó. A principios del año 1470, pasó un año y medio en Colonia, donde tradujo *Recuyell of the Historyes of Troye* del francés al inglés y aprendió la imprenta. De regreso a Brujas, buscó la ayuda del iluminador y calígrafo **Colard Mansion** y, en el año 1475, la traducción de Caxton se convirtió en el **primer libro impreso en lengua inglesa**.
La imprenta llegó a Francia en el año 1470, cuando tres impresores alemanes, **Michael Friburger, Ulrich Gering y Martin Crantz**, fueron patrocinados por el prior y el bibliotecario de la Sorbona para establecer allí una imprenta.
Inicialmente se usaron letras romanas y después góticas. Las primeras impresiones francesas combinaban las tipografías góticas con ilustraciones xilografiadas, con bloques modulares que llenaban el espacio de flores, aves, hojas, animales y retratos.
**Philippe Pigouchet** introdujo el **puntillismo**, que consiste en llenar de puntos blancos las áreas negras del bloque de madera. Impresores alemanes llegaron también a España, donde influyeron en el desarrollo de la imprenta local. Una de las obras maestras del diseño tipográfico español es la **Biblia Políglota Complutense**, de 1514-1517, compuesta por textos correlativos en muchas lenguas.
En las primeras décadas de la tipografía, los impresores y artistas gráficos alemanes establecieron una tradición nacional del libro ilustrado y la difundieron por toda Europa y el Nuevo Mundo.