Portada » Economía » Gestión de Costos: Dificultades de los CIF, Variaciones y Clasificación Contable
Los Costos Indirectos de Fabricación (CIF) presentan cinco dificultades principales que complican su gestión y asignación:
Además, parte de los CIF son fijos y otra parte variables, lo que provoca que su comportamiento no sea lineal y complique la comparación entre períodos, la presupuestación y el cálculo de tasas predeterminadas. Todo esto provoca que requieran un análisis para identificar si se originan por cambios de volumen, eficiencia o variaciones presupuestarias. Estas características hacen que los CIF sean uno de los rubros más complejos del sistema de costos.
Las bases de distribución son los criterios usados para asignar los CIF a los productos según cómo cada proceso los consume. La base debe ser representativa y proporcional al uso real de los costos. Las más habituales son:
Las variaciones de los CIF predeterminados pueden deberse a gasto o a capacidad/volumen.
Ocurren cuando el CIF real difiere del presupuestado. Son responsabilidad de los sectores que generan esos costos, como mantenimiento, energía, servicios generales y supervisión.
Ocurren cuando se trabaja más o menos horas que las previstas. Son responsabilidad del sector Producción, que administra el nivel de actividad y el uso de la capacidad instalada.
Es una erogación que tiene relación directa con la producción de bienes o servicios, y cuya venta generará una utilidad futura. Se activa contablemente mientras no se venda el producto.
Es un desembolso necesario, pero no directamente relacionado con la producción. Se imputa al Estado de Resultados en el momento en que ocurre (ej. sueldos del personal de ventas).
Toda erogación sobre la cual no se espera ningún valor compensatorio (por ejemplo, un incendio o un robo). Va siempre al Estado de Resultados.
Una variación es la diferencia que surge entre el costo real incurrido y el costo estándar previamente establecido para un elemento del costo. Permite medir la eficiencia del proceso productivo, ya que muestra si se consumió más o menos de lo que estaba previsto en términos de precio, cantidad, tarifa, eficiencia o nivel de actividad.
Las variaciones pueden ser favorables o desfavorables, y se utilizan como herramienta de control de gestión para identificar desvíos, analizar sus causas y asignar responsabilidades dentro de la organización:
El Sueldo Anual Complementario (SAC), conocido como aguinaldo, es una carga social cierta, ya que su determinación es exacta y conocida de antemano. Consiste en el pago de un sueldo extra por año, dividido en dos cuotas.
Su cálculo se basa en el 50% de la mayor remuneración mensual devengada en cada semestre, incluyendo todos los conceptos remunerativos como básico, presentismo, horas extras, comisiones o premios. Si el mejor sueldo ocurre en diciembre y no se lo consideró para el cálculo de junio, se liquida la diferencia en enero.
La asignación de los Costos Indirectos de Fabricación se realiza en tres etapas:
Consiste en asignar los CIF a cada centro de costos, tanto productivos como de servicios, usando bases representativas del consumo (m², personal, horas máquina).
Transfiere los costos acumulados en los centros de servicios hacia los centros productivos, ya que solo estos fabrican bienes, utilizando bases que reflejan el servicio prestado.
Aplica los CIF de los centros productivos a las órdenes o procesos mediante una tasa predeterminada, permitiendo valuar la producción y detectar subaplicación o sobreaplicación.
Los costos pueden clasificarse según diversos criterios, lo que permite un análisis detallado de su comportamiento y aplicación en la gestión. Esta clasificación es crucial para la toma de decisiones informadas:
