Portada » Informática » Fundamentos de Blockchain: Tipos, Características y el Proceso de Minería
Existen varias clasificaciones para los tipos de blockchain, pero principalmente se habla de tres categorías fundamentales: públicas, privadas y federadas o de consorcio.
La principal diferencia se relaciona con quién tiene acceso a participar en la red, ejecutando el protocolo de consenso y manteniendo la cadena de bloques. Este tipo de redes son completamente abiertas y cualquiera que lo desee puede unirse y participar en ellas.
Las decisiones son tomadas mediante varios mecanismos de consenso descentralizados, como la Prueba de Trabajo (PoW, Proof of Work) o la Prueba de Participación (PoS, Proof of Stake).
Los protocolos de blockchain públicos, basados en algoritmos de consenso de última generación, son de código abierto (Open Source) y sin permisos. Por lo tanto:
Dentro de este tipo de blockchains públicas, podemos destacar como más relevantes:
Una red privada requiere de una invitación que debe ser validada, ya sea por el creador de la red o por un grupo de reglas establecidas al momento de su creación. Las compañías que implementan este tipo de blockchain lo hacen normalmente con el fin de limitar quién puede participar y realizar transacciones en la red.
Los permisos de escritura se mantienen centralizados en una organización, y estos pueden ser públicos o privados. Las blockchains con permisos también ofrecen una mejor escalabilidad en términos de rendimiento (throughput) de las transacciones. En este tipo de modelo con permisos se facilita la gestión de la identidad digital, el seguimiento de artículos físicos, la auditoría y la gestión de la privacidad.
En cuanto a las blockchains privadas, destacamos las siguientes:
En este tipo de red, se busca eliminar la autonomía completa de una única autoridad sobre la blockchain. Para ello, se establece un grupo de compañías o individuos que se unen para tomar las mejores decisiones para la red. Estos grupos son los llamados consorcios o federaciones.
No se permite a ninguna persona con acceso a internet participar en el proceso de validación de transacciones. Estas redes suelen ser más rápidas y proveen de más privacidad en las transacciones. Suelen ser utilizadas por el sector energético o el bancario.
Por la parte de blockchains híbridas, destacamos:
Podemos definir el minado como el proceso por el cual se validan las transacciones que se ejecutan en la tecnología blockchain. La misión de la minería es revisar las transacciones y agrupar las últimas generadas en bloques, para certificar que nadie utiliza dos veces una criptomoneda ni se falsean estas en el mercado. Este proceso consta de dos fases principales:
La función de minar, en principio, la puede realizar cualquier persona, pero es fundamental disponer de componentes electrónicos muy potentes para descifrar los bloques de manera eficiente y productiva, siendo crucial el coste de la electricidad.
Actualmente, el desarrollo del minado se centra en los denominados pools de minado, que consisten en que varios mineros combinan sus recursos con el propósito de ganar potencia y obtener mayores recompensas. En este ámbito, hay que destacar las granjas de minado, que son espacios en los cuales se establecen recursos tecnológicos superpotentes (nodos) que funcionan como un “superordenador” y consiguen mayor potencia para realizar las tareas de verificación y creación de bloques.
