Portada » Biología » Explorando la Célula: Estructura, Funciones y Origen de la Vida
Las células de los animales, las plantas, los hongos y los protozoos son células eucarióticas. Todas comparten estructuras esenciales:
Aunque ambas son eucarióticas, presentan distinciones:
El núcleo es la estructura más prominente, usualmente central, que dirige y controla las funciones celulares. Está rodeado por una envoltura nuclear con poros que regulan el intercambio con el citoplasma.
El ciclo celular es el período de vida de una célula, desde su nacimiento hasta su división. Regula el crecimiento, la división y la reproducción celular.
A diferencia de las eucariotas, las células procarióticas carecen de un núcleo definido; su material genético se localiza libremente en el citoplasma.
La nutrición celular implica la incorporación de materia y energía del medio, su transformación (metabolismo) y la expulsión de desechos. Se clasifica en:
Las células elaboran sus propios compuestos orgánicos a partir de materia inorgánica (CO2, H2O). Las células vegetales, algas y cianobacterias realizan la fotosíntesis gracias a la clorofila, capturando energía solar. Este proceso ocurre en los cloroplastos y libera oxígeno.
Las células obtienen compuestos orgánicos del medio. Incluye a las células animales, hongos y eucariotas sin pigmentos fotosintéticos. Generalmente, incorporan compuestos orgánicos ya digeridos.
La energía de los compuestos orgánicos se extrae mediante dos procesos:
Las células reciben estímulos del medio y responden, a menudo mediante el movimiento. Las células eucarióticas pueden moverse usando:
Otras respuestas incluyen la secreción de sustancias (hormonas) o la modificación del ciclo celular. Las células procarióticas también pueden tener flagelos o formar esporas de resistencia para sobrevivir en condiciones adversas.
Propuesta por Lynn Margulis, explica el origen de las células eucarióticas a partir de procarióticas. Sugiere que las mitocondrias y los cloroplastos se originaron de bacterias endosimbióticas que fueron fagocitadas por una célula huésped.
La pregunta sobre cómo surgió la vida ha generado diversas explicaciones a lo largo de la historia.
Postulan un origen divino o sobrenatural. Incluyen el creacionismo (basado en relatos religiosos como el Génesis) y la idea de un ser supremo creador. La concepción fijista asume que las formas de vida originales no han cambiado.
Buscan explicaciones basadas en procesos naturales.
Teoría sostenida desde Aristóteles hasta el siglo XIX, que afirmaba que los seres vivos podían surgir espontáneamente de materia inorgánica o en descomposición.
Francesco Redi demostró que los gusanos en la carne descompuesta provenían de huevos de moscas, refutando la generación espontánea para organismos macroscópicos. Colocó carne en frascos: unos abiertos y otros cubiertos con gasa. Solo los frascos abiertos mostraron gusanos.
Louis Pasteur refutó definitivamente la generación espontánea para los microorganismos. Utilizó matraces con cuellos de cisne que permitían la entrada de aire pero retenían los microorganismos. El caldo en estos matraces permaneció estéril, mientras que en un matraz con cuello cortado se contaminó rápidamente.
Propone que la vida surgió de materia inorgánica en las condiciones de la Tierra primitiva (atmósfera reductora, alta radiación, actividad volcánica). Moléculas orgánicas simples se habrían formado y asociado en el»caldo primitiv» para dar lugar a estructuras autorreplicantes (coacervados).
Stanley Miller recreó las condiciones propuestas por Oparin y Haldane en un laboratorio. Introdujo gases como metano, amoniaco e hidrógeno en un recipiente con agua hirviendo y sometió la mezcla a descargas eléctricas. Tras una semana, analizó el contenido y encontró la formación de compuestos orgánicos, apoyando la hipótesis de un origen químico de la vida.