Portada » Ciencias sociales » Estructuras y Grupos Sociales: Fundamentos de la Organización Humana
Constituyen las condiciones formales y dinámicas de la existencia y el funcionamiento de los conjuntos humanos, cuya construcción y evolución depende de ellas. Se encuentran entre entes sociales individuales o colectivos, de una misma naturaleza o distinta, pero siempre tienen el carácter de un vínculo exigido por el desempeño de una actividad funcional. No todas tienen el mismo grado de necesidad ni la misma importancia.
Hacen a la misma naturaleza del hombre como ente social; constituyen condiciones de su existencia y realización. Sin ellas no habría sociedad o esta no respondería a las exigencias mínimas de su fin. Por ejemplo: la procreación (si no hay unión social entre el hombre y la mujer, no se reproducirían), la relación de autoridad que se establece espontáneamente entre padre e hijo y, por último, la obtención de alimentos, necesaria para la supervivencia.
Las estructuras naturales son permanentes y necesarias para la existencia de las sociedades.
Existen varias, entre ellas:
Surgen, se desarrollan y desaparecen a lo largo de la evolución temporal de los pueblos.
Provienen de las relaciones jerárquicas basadas en las diferencias naturales como presupuesto de orden y de subsistencia.
Poseen un orden propio, diferente del que tendría una simple suma de sus elementos constitutivos.
Infraestructura: Sostiene que no todas las estructuras tienen la misma importancia en la evolución social. Por las circunstancias históricas, algunas se imponen como primordiales para la supervivencia. La infraestructura priva sobre todas las demás estructuras coexistentes.
Superestructura: Se refiere a conjuntos de relaciones sociales de naturaleza mental (creencias, ideas, valores éticos, normas jurídicas, tendencias artísticas, etc.) que vinculan en determinado ámbito a individuos que piensan del mismo modo.
Según Mahieu, es:
“todo conjunto formado por dos o más individuos unidos y jerarquizados para desempeñar colectivamente una o más funciones que cada uno de ellos no podría ejercer por sí solo”.
“todo conjunto formado por dos o más individuos unidos y jerarquizados para desempeñar en común una o varias actividades no funcionales o parafuncionales que cada uno de ellos podría ejercer, con menor comodidad o satisfacción, de modo individual”.
Es común encontrar que fue denominada la célula básica de la sociedad, y el sentido de tal afirmación reside en su origen de ser, siendo que su finalidad está en asegurar la procreación, tanto en cuanto a la concepción como a garantizar la subsistencia de los vástagos y promover la socialización de los mismos.
Su función es preparar al niño para todas sus futuras actividades de adulto. Es un grupo especializado en la función educativa complementaria y diferenciadora de la que cumple la familia. Incluimos en él desde la enseñanza básica hasta la universidad. Se trata de un grupo artificial heterogéneo que tanto mejor cumple su función en cuanto se asemeje a la familia con sus estructuras jerárquicas verticales. Aunque el maestro se encuentra en una situación de inferioridad si lo comparamos con el padre de familia a quien sustituye, tiene la ventaja de la especialización.
Este grupo es sustitutivo y complementario de la familia, que se justifica en la medida en que el niño está llamado a actuar en un marco social diferente del que constituye la célula básica. Adapta al hombre a la función social. Es un grupo diferencial. Toda concepción unitaria e igualitaria de la enseñanza carece de sentido. La escuela tiene que apegarse a lo real. No hay vida social sin diferenciación ni enseñanza satisfactoria sin elección.
Es un grupo sustitutivo y complementario que desarrolla tareas económicas en las que sus miembros se procuran los bienes de consumo que necesitan. Es un grupo constituido por un conjunto de individuos que, mancomunados y jerarquizados, fabrican un producto o prestan un servicio. Su orden estructural no es más que el de la familia o la escuela y procede de las mismas exigencias de producción. La autoridad y la responsabilidad del jefe son esenciales; sin ellas no se podría hablar de grupo social y el taller se disociaría por impotencia para cumplir su función. Es un conjunto de productores complementarios. El factor contractual es más importante que en la familia, pues nadie pertenece al grupo económico contra su voluntad. Está sometido a las exigencias técnicas de producción.
Es el conjunto constituido por los varones adultos y aptos de las familias, interesados, o por profesionales a sueldo. Tiene la función de desempeñar las actividades de defensa y, eventualmente, de protección (en los ejércitos modernos se incluye el ingreso de las mujeres).
En todo ordenamiento social existe un grupo encargado de las funciones de tipo religioso (parroquia o iglesia), porque el hombre tiene aspiraciones más elevadas, de naturaleza religiosa. Existe una búsqueda de un contacto con fuerzas o seres sobrenaturales que es una constante en la historia y que comúnmente adopta formas colectivas (establecimiento de un sacerdote con estructura vertical).
Es el grupo o individuo especializado en la función política. En las naciones actuales constituye un órgano de estructuras múltiples pero de funcionamiento unitario. No puede desempeñar su papel ni existir sin un orden interno, de ahí su estructuración piramidal. Su finalidad es tomar decisiones a favor de la unidad de la comunidad y buscar la supervivencia de la comunidad política, procurando y obteniendo el bien común.
Sostiene que una acción es social cuando el sentido mentado por el sujeto está referido a la conducta de otros, orientándose por este en su desarrollo. Es fundamental la presencia de este sentido puesto por el agente, en virtud de que quedan fuera la conducta reactiva o instintiva y la pura relación social. Dicho sentido ha de ser referido a otros, por lo que no es social la acción homogénea (hay igualdad de sentido en el espacio, pero sin referencia recíproca) ni el registro estadístico (en que hay igualdad de sentido en el tiempo).
No se puede desconocer que la simple intención del agente no basta para construir sociedad entre los hombres. Si el sujeto paciente no percibe ni recibe nada de su acción, esta no será un fenómeno “interhumano”, sino puramente individual. En el mejor de los casos, una acción social en grado de tentativa o frustración. Lo que da a los actos su verdadero significado social es el modo o signo con que se reciben por los demás.
La sociedad supone siempre una acción recíproca, por ello habrá que distinguir en su fenomenología una doble trayectoria: de A a B, y de B a A. Como sin la reacción o reciprocidad el acto queda frustrado y no constituye verdadera socialización, parece conveniente insistir en que el primer grado del ser social es la conexión de actividades humanas, la cual encaja en la categoría clásica de relación, y no en la de acción.
La reciprocidad se entiende en dos sentidos:
Proceso social: Indica aquí sucesión de acciones tomadas más desde el punto de vista de su pluralidad que de su posible unidad. Es una experiencia de los sujetos que, por la naturaleza de las cosas, lleva en sí un principio de automodificación (es más temporal).
Situación social: Se entiende como pluralidad unificada de relaciones y procesos, sin confundirse con las unidades macrosociológicas (está más enmarcada).
Se pueden identificar y diferenciar tres clases de elementos:
Son una federación de grupos y/o asociaciones orgánicamente unidos en función de un interés común; es decir, son complejos más amplios que las familias y los demás grupos y asociaciones. Pueden ser de dos clases:
Es la comunidad más sencilla y primitiva. Surgió del desarrollo de la familia patriarcal y es un paso intermedio entre el grupo complejo y la comunidad. Es un grupo en cuanto sus integrantes conviven bajo una misma autoridad inmediata, cuyo carácter paternal no varía con la multiplicación de las células conyugales. Es una comunidad en tanto los grupos que la componen no son complementarios, como lo serían en la empresa. Su característica principal es el origen biológico común: su organización social se basa en el parentesco o consanguinidad. La soberanía política de la autoridad del patriarca depende necesariamente de la autonomía del clan. Inmediatamente que es absorbido en una comunidad mayor más compleja, su autoridad declina a favor de la autoridad del poder político federador, por imposibilidad de dualidad de poder soberano.
Conjunto de familias tronco o conyugales en pie de igualdad bajo una misma autoridad soberana.
Surge de las necesidades de defensa. El señor feudal era el jefe militar, conductor político, juez y administrador de los intereses del conjunto. El siervo formaba parte de un conjunto social cerrado, dentro del cual tenía obligaciones y derechos; no dependía del señor feudal sino del feudo. Por el contrario, el esclavo era propiedad de su amo en las mismas condiciones que un animal doméstico.
Comunidad primaria, autónoma o parte de un conjunto federativo más amplio, que abarca a todos los grupos sociales y asociaciones que conviven en un mismo territorio: familias, talleres, escuelas, parroquias, clubes, etc. Mantienen obligatoriamente relaciones estrechas y poseen intereses comunes por su ubicación geográfica. Sus estructuras sociales son tangibles. Surgió cuando los burgos incorporados a los feudos obtuvieron fueros que les dieron cierta autarquía dentro de la comunidad, y por la necesidad en la cual se encontraban las familias estrechamente yuxtapuestas de ordenar su obligada vida común.
Resultado de un proceso político. Se creó por federación de municipios alrededor de un núcleo central. Es el resultado de un movimiento de concentración y un ente histórico. No se puede autogestionar, necesita de un grupo especializado en la conducción política: el Estado.
Posee poder soberano y la facultad de autogobernarse. No hay otro poder sobre él dentro de su territorio. Es la identidad común basada en una religiosidad patriótica.
Sus unidades constitutivas están políticamente organizadas como federaciones de comunidades nacionales.
Suministran a la población los bienes y servicios que necesita.
Conjunto orgánico con estructuras verticales ascendentes y descendentes. Las exigencias de la actividad común determinan leyes de convivencia e imponen a la comunidad el respeto de sus derechos.
Respecto de cuestiones religiosas, la estructura primordial es la parroquia. Así, los fieles de una misma confesión constituyen comunidades intermedias, como las parroquias federadas en la diócesis.
Existen dos formas para armonizar las relaciones entre el Estado y la Iglesia:
Estado: Es el órgano rector que impone a los elementos constitutivos del cuerpo social la intención unitaria, sin la cual el conjunto estallaría. La comunidad depende de él. No hay federación sin federador. Busca unificar fuerzas poderosas y otorga a las comunidades intermedias la prerrogativa de afirmarse plenamente. Es más fuerte si alienta a sus partes a que se fortalezcan.
Federalismo: Es un sistema estructurado sin el cual la comunidad se convertiría en un conglomerado inorgánico de grupos y asociaciones. Mediante él, el cuerpo social reconoce, respalda y, eventualmente, fomenta la autonomía interna de las comunidades intermedias que abarca.
