Portada » Otras materias » Estadística Aplicada a la Criminalidad: Conceptos, Métodos y Fuentes
Para realizar el estudio de un problema es necesario delimitarlo y formularlo adecuadamente, definiéndolo de manera clara y precisa.
Se basa primordialmente en obtener un máximo de información empleando un mínimo de costo y tiempo.
Provienen de los hechos y observaciones reales y documentadas que se utilizan en forma cotidiana. Es la parte que lleva más tiempo.
Consiste en desglosar los datos y establecer el problema en modelos matemáticos apropiados que nos permitan entender en forma correcta el objetivo que buscamos.
Consiste en obtener conclusiones acerca de la población muestreada que dio lugar a los datos recopilados; es el principal objetivo de las investigaciones estadísticas.
Consiste en la fase final del estudio; esta determinará si lo obtenido es adecuado o no, dependiendo de los resultados obtenidos.
Karl Pearson fue un prominente científico, matemático y pensador socialista británico, que estableció la disciplina de la estadística matemática. Fue fundador de la bioestadística.
Mediante la utilización de datos cuantitativos y cualitativos, la estadística criminal busca dar a conocer las tasas de delincuencia de un territorio, de un país o de una región, en un momento o periodo determinado y su evolución a lo largo del tiempo.
Son aquellas en las que los resultados posibles no son valores numéricos.
Aquellas cuyo resultado es un número.
Se considera como el proceso que se relaciona con los métodos y/o técnicas que se utilizan para la recopilación, organización y análisis de un conjunto de datos cuantitativos, con el objeto de describir en forma apropiada las diversas características del conjunto que tomamos en cuenta.
Es la técnica o metodología mediante la cual es posible realizar estimaciones de las características de una población o realizar la toma de decisiones basadas en resultados muestrales.
Adolphe Quételet, de origen francés, nacido en el siglo XVIII, quien fuera astrónomo, naturista, matemático, sociólogo y estadista, presidió el primer congreso de estadística celebrado en Bruselas en 1853. Se lo conoce como el padre de la estadística moderna.
Los medios de que dispone actualmente un investigador para reconocer la delincuencia son las estadísticas oficiales, encuestas de victimización y estudios de auto informe.
Las Estadísticas Oficiales publicadas recogen los datos obtenidos por los Órganos de Control Social Formal: la Policía, los Cuerpos de Seguridad, los Órganos de Administración de Justicia y los Organismos Penitenciarios.
“Son aquellas informaciones cuantificadas sobre comportamientos efectivamente producidos en la vida social, presuntamente delictuosos, a partir de encuestas realizadas en domicilios particulares a ciudadanos sobre sus propias experiencias de victimización en un cierto período de tiempo”.
Donde se pregunta al sujeto si ha cometido algún hecho delictivo.
Se considera y se define como “la disciplina que elabora, sistematiza y evalúa el conjunto del aparato técnico procedimental del que dispone la ciencia, para la búsqueda de datos y la construcción del conocimiento científico”.
La metodología sirve a las ciencias como soporte conceptual y procedimental suficiente para asegurar la contrastabilidad, aplicabilidad, pertinencia y validez de los procesos de investigación científica, de manera de cumplir con exigencias y protocolos que cada disciplina exige para considerar a cada producción como un hallazgo de carácter científico.
“Investigamos porque buscamos la verdad”. Utilizamos métodos de investigación porque queremos descubrir nuevos hechos y nuevas realidades. Son los fundamentos de la modernidad y de los nuevos paradigmas, que nos permiten resolver bajo estructuras estadísticas los problemas de la inseguridad en nuestro grupo social.
Son aquellos que se relacionan tanto a procedimientos relacionados con la criminalidad, la administración, la economía, educación, etc. Busca establecer datos concisos, específicos, capaces de ser analizados objetivamente por diferentes procedimientos y se prestan a comparaciones que derivan en nuestro caso con la aplicación de políticas criminales adecuadas.
Los alcances de la estadística son justamente la recolección y agrupamiento de datos de diversos tipos para construir informes estadísticos, siempre desde un punto de vista cuantitativo y no cualitativo. Nos ayuda a estudiar poblaciones acudiendo a una pequeña muestra; por lo tanto, podemos analizar a partir de ello las limitaciones en razón de que no nos permite conocer más que numéricamente aspectos que requieren un trabajo más complejo y profundo. Trata de poblaciones y establece afirmaciones sobre parámetros de estas, no ocupándose de lo que ocurre con individuos concretos.
Lo importante de la estadística como ciencia es que, en muchos casos, la información cuantitativa que nos brinda permite conocer distintos factores que acontecen en el entramado social: factores climáticos, pobreza, miseria (indigencia), educación (analfabetismo).
Los resultados no pueden ser absolutamente ciertos y deben expresarse como una probabilidad, es decir, las afirmaciones de las estadísticas son probabilísticas y no explican fenómenos, ni establecen relaciones causales, solo asociaciones estadísticas.
Toda ciencia es medición, toda medición es estadística.
Fue definido por Olaeta, Hernán (2008) (1), en “Delito y Sociedad” como: “El conjunto de Instituciones, herramientas, saberes y agentes especializados que componen el dispositivo técnico-burocrático de contabilidad social y registro sistemático de datos”.
Tenía un doble interés:
Aplicar judicialmente el agravante penal de reincidencia en todo el territorio nacional.
Contar con información útil que sirviera de fuente legislativa y para tomar medidas que lleven a sanear costumbres, corregir vicios y disminuir en consecuencia la delincuencia.
Durante el año 1979 (en pleno régimen militar), mediante la Ley N° 22.117, se reforma la Ley del Registro Nacional de Reincidencia y Estadística Criminal y Carcelaria, disponiéndose una ampliación en la información remitida por los tribunales (tanto en medidas procesales como en los datos de los imputados), agregándose la obligación de las unidades penitenciarias de informar acerca de los egresos de toda persona condenada por la comisión de un delito, así como también de la Policía Federal Argentina de informar sobre los pedidos de captura que le hayan dirigido. También amplía los Organismos a quienes se les podría suministrar información confidencial con la que contara el Registro, incluyendo no solo a jueces sino también a Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval Argentina y las Policías Provinciales, para atender necesidades de investigación.
Las funciones en el área de Estadística se ampliaron hasta la sanción de la Ley 25.266, modificatoria de la Ley 22.117, que delega en la DNCP la facultad de confeccionar la estadística anual sobre criminalidad y funcionamiento del sistema de Justicia Penal del país sobre la base de la información registrada por las Policías, las Fuerzas de Seguridad, los Tribunales y Fiscalías en lo penal y Servicios Penitenciarios. Mediante la sanción de la Ley N° 25.266, por medio de la cual se transfiere y amplía la función Estadística a la Dirección Nacional de Política Criminal del Ministerio de Justicia de la Nación. Se detallan los Organismos que estarán obligados a remitir información Estadística a los Organismos rectores (Policías, Fuerzas de Seguridad, Tribunales, Fiscalías, Servicios Penitenciarios).
A partir de esta Ley, se diseña e implementa el Sistema Nacional de Estadísticas sobre Criminalidad (SNEC), sobre la base de dos grandes componentes bien diferenciados:
De esta manera, se diseñan e implementan los actuales Sistemas Nacionales de Información Estadística Oficial:
Las estadísticas oficiales son la principal fuente de información para conocer el volumen y evolución de la criminalidad en nuestro país, aunque fueron hechas en forma periódica.
Es el organismo que unifica y ejerce todas las actividades estadísticas oficiales.
Recolecta información sobre los hechos presuntamente delictuosos registrados por las fuerzas policiales, las fuerzas federales de seguridad y otras entidades oficiales de recepción de denuncias.
Se agregan metodologías, estudios sobre el funcionamiento del sistema de justicia penal, así como encuestas de victimización que tienen por objeto indagar, desde una fuente diferente a los propios registros de las agencias del sistema penal, acerca de experiencias de victimización y percepciones sobre inseguridad en la población.
Las estadísticas policiales son un buen indicador para tener un conocimiento fiable del estado de la seguridad, pero deben ser interpretadas no únicamente con otros instrumentos como las encuestas de victimización o de seguridad, sino también con el conocimiento de las decisiones organizativas de la propia policía, de los cambios legislativos que afectan a las tipologías penales y de cualquier otro factor que pueda tener alguna influencia en los registros policiales.