Portada » Psicología y Sociología » El Desarrollo Integral del Niño en Edad Escolar (7-11 años): Aspectos Biosociales, Cognitivos y Psicosociales
La niñez intermedia, entre los 7 y los 11 años, es normalmente una época de la vida feliz y saludable. El ritmo de crecimiento es más lento.
El número de niños con sobrepeso está aumentando. Las posibles causas de obesidad infantil son:
El tratamiento recomendado incluye:
La pubertad es el periodo en el que la maduración sexual y el crecimiento físico marcan el final de la infancia. Dos razones para una pubertad temprana pueden ser el sexo (las chicas antes) y los genes; una tercera es el sobrepeso.
El crecimiento o desarrollo del cerebro produce:
El desarrollo de habilidades motoras continúa durante la infancia intermedia, siendo la prueba más obvia de la maduración cerebral y de la experiencia. Los niños mayores tienen un tiempo de reacción más rápido que los niños más pequeños, lo cual es un elemento clave de la coordinación. Los “juegos de pillar”, propios de esta época, ayudan a regular y coordinar los lóbulos frontales del cerebro.
Por lo general, los niños en edad escolar son saludables, fuertes y capaces; pero esto no excluye la existencia de problemas crónicos de salud. Se describen tres modelos de prevención:
Los niños en edad escolar (7-11) están preparados para aprender y asimilar casi todo lo que no sea demasiado abstracto. Durante este periodo, todos los días se produce un pequeño avance en el conocimiento.
Vygotsky veía al niño como un aprendiz del pensamiento: su capacidad cognitiva es estimulada y dirigida por miembros de la sociedad de más edad y experiencia (participación guiada, ZDP – Zona de Desarrollo Próximo).
Según Piaget, el logro cognitivo más importante durante la segunda infancia es el pensamiento operatorio concreto, caracterizado por la habilidad para razonar de forma lógica sobre experiencias y percepciones directas. Empiezan a comprender ciertos principios lógicos y se vuelven más sistemáticos, objetivos, científicos y educables que en la etapa anterior. Los principios lógicos del pensamiento de las operaciones concretas facilitan el aprendizaje y lo hacen más divertido. Piaget señala que los principios lógicos subyacen a cuatro operaciones:
Un enfoque alternativo para la comprensión de la cognición proviene de la teoría del procesamiento de la información. Los distintos tipos de memoria son fundamentales para estos logros:
Lo importante no es simplemente el almacenamiento, sino también la recuperación. También la velocidad del procesamiento es importante, ya que incrementa la capacidad mental. Por último, cabe destacar que cuanto más saben, más pueden aprender y recordar.
Los procesos de control regulan el análisis de la información dentro del sistema de procesamiento de la información, y se incrementan durante la niñez intermedia.
El desarrollo moral es una dimensión del desarrollo que pretende comprender cómo piensan los niños sobre temas morales. El pensamiento moral empieza cuando los niños comienzan a ponerse en el lugar de los demás. Alrededor de los 7 años, comienzan a diferenciar entre los principios morales y las convenciones sociales.
La cultura infantil se refiere a los hábitos, estilos y valores reflejados en las reglas y rituales que establecen los niños al margen de la sociedad de los adultos. Los niños aprenden a negociar, a compartir y a comprometerse con sus compañeros. En esta etapa es prioritario llevarse bien con los compañeros, quienes tienen una fuerte influencia que puede ser tanto positiva como negativa. Son conscientes de las opiniones, juicios y logros de sus compañeros y necesitan a estos compañeros para autoafirmarse y sentirse acompañados. Tienden a comparar sus habilidades y atributos con los de sus iguales.
Algunos niños son más populares que otros:
Entre los niños no populares hay diferentes tipos:
Los niños rechazados a menudo carecen de capacidad para entender el comportamiento social.
Las amistades son muy valoradas en esta etapa; los niños de 10 años suelen tener un “mejor” amigo.
La intimidación o acoso (bullying) consiste en un intento repetido y sistemático de infligir daño a alguien que no puede defenderse o que es poco probable que lo haga. Incluye agresiones físicas, burlas, bromas e insultos. Las consecuencias de sufrir acoso incluyen ansiedad, depresión y baja autoestima.