Portada » Magisterio » Dominando la Toma de Decisiones Gerenciales: Proceso, Tipos y Racionalidad Limitada
La toma de decisiones es el proceso mediante el cual un gerente identifica un problema, evalúa alternativas y selecciona la mejor opción para resolverlo. Es una parte esencial de todas las funciones administrativas (planear, organizar, dirigir y controlar).
Decisiones programadas: Son rutinarias, repetitivas y se manejan con políticas o procedimientos ya establecidos.
Ejemplo: aprobar un pedido habitual de materiales.
Decisiones no programadas: Son únicas, no estructuradas y requieren juicio y creatividad.
Ejemplo: decidir si entrar a un nuevo mercado.
Los gerentes toman decisiones bajo tres tipos de condiciones:
Certeza: Se conocen todos los resultados posibles.
Riesgo: Se pueden estimar probabilidades de éxito o fracaso.
Incertidumbre: No se tiene información suficiente para prever resultados.
Modelo racional: Asume que los gerentes son completamente lógicos y buscan la mejor solución posible (maximizan resultados).
Comportamiento real (racionalidad limitada): En la práctica, los gerentes operan con información incompleta y tiempo limitado; por ello satisfacen, es decir, eligen una opción que sea “suficientemente buena”.
Robbins identifica cuatro estilos, según la forma en que el gerente percibe la información y toma decisiones:
| Estilo | Características principales |
|---|---|
| Directivo | Práctico, rápido, se enfoca en lo inmediato. |
| Analítico | Cuidadoso, estudia muchas alternativas antes de decidir. |
| Conceptual | Creativo, de visión amplia, considera el largo plazo. |
| Conductual | Se enfoca en las personas, busca consenso y aceptación. |
Los gerentes, como todos los humanos, pueden caer en sesgos como:
Exceso de confianza
Anclaje (aferrarse a la primera información recibida)
Confirmación (buscar solo datos que confirman lo que ya piensan)
Disponibilidad (dar más peso a la información más fácil de recordar)
Escalada del compromiso (mantener una decisión fallida por orgullo)
Los gerentes actuales enfrentan entornos cambiantes, por lo que deben:
Usar datos e información (analytics, Big Data).
Fomentar la creatividad y la intuición.
Promover una cultura de aprendizaje en la organización.
El proceso de toma de decisiones es el corazón del trabajo gerencial. Los buenos gerentes:
Diagnostican correctamente los problemas.
Evalúan opciones de manera objetiva.
Equilibran la racionalidad con la intuición.
Aprenden de los errores y mejoran continuamente.
Robbins enfatiza que identificar correctamente el problema es el paso más crítico. Muchos gerentes intentan resolver síntomas (efectos) y no causas reales.
Ejemplo: si las ventas bajan, el problema puede no ser el equipo de ventas, sino un producto obsoleto o mala promoción.
Además del proceso racional, la intuición (basada en la experiencia y el “instinto gerencial”) juega un papel clave. Robbins no la ve como opuesta a la razón, sino complementaria: los gerentes exitosos combinan datos e intuición.
Los gerentes de nivel alto suelen tomar más decisiones no programadas, estratégicas y bajo incertidumbre.
Los gerentes de nivel operativo toman más decisiones programadas, rutinarias y estructuradas.
En teoría, el decisor racional maximiza resultados (busca la mejor opción). En la práctica, debido a la racionalidad limitada (poca información, tiempo o recursos), los gerentes “satisfacen”: eligen la primera opción que cumple con lo necesario.
La cultura de la empresa puede favorecer o inhibir la buena toma de decisiones.
Culturas abiertas y participativas fomentan creatividad e innovación.
Culturas rígidas o autoritarias pueden generar conformismo o miedo a equivocarse.
Robbins menciona que muchas decisiones gerenciales se toman en equipo, no individualmente.
Más ideas y perspectivas.
Mayor aceptación de la decisión final.
Toma más tiempo.
Riesgo de “pensamiento grupal” (groupthink): todos piensan igual y se evita el conflicto, lo que lleva a malas decisiones.
En las ediciones más recientes, Robbins introduce el tema del data-driven decision making:
Uso de Big Data, analytics, sistemas de información gerencial.
El objetivo es reducir la incertidumbre y apoyar decisiones más objetivas.
El libro también resalta que la creatividad no es un lujo, sino una parte esencial del proceso decisional. Los gerentes deben fomentar un ambiente donde los empleados puedan proponer soluciones nuevas.
