Portada » Geografía » Conceptualización y Estructura de la Ciudad: Origen, Funciones y Desafíos Urbanos
La ciudad puede ser definida a partir de parámetros cuantitativos como:
El enfoque cualitativo tampoco ofrece una solución definitiva sobre la conceptualización de la ciudad, pues se trata de una realidad cambiante, con distinta significación según los periodos históricos. En nuestro presente, no puede encasillarse sin más al predominio de actividades no agrarias o a la mayor presencia de los transportes, la industria y el comercio.
Por otra parte, es necesario considerar en el concepto de ciudad lo que se conoce como el modo de vida urbano, distinto de los usos y comportamientos del modo de vida rural, caracterizado por los siguientes aspectos:
En términos generales, las zonas rurales aportan emigrantes y las ciudades los reciben, lo que influye también en el índice medio de edad, más elevado en las áreas rurales que en las urbanas, y en el índice de masculinidad, pues generalmente es la población masculina la que emigra.
En el medio rural predomina el sector agrícola, mientras que en las ciudades hay una mayor presencia de las actividades comerciales, industriales y administrativas, siendo el sector agrícola prácticamente inexistente.
Tanto la densidad de población bruta (número de personas en superficie) como la neta (número de personas por superficie construida) es mayor en el medio urbano que en el rural.
En general, el nivel económico de las ciudades es superior al de los pueblos, pues los poderes económicos se concentran en las ciudades. En cuanto a los aspectos socioculturales, en las ciudades no se convive tanto como en el medio rural, existe mayor libertad de comportamiento y la censura social es más abierta, lo que conduce a formas de vida más liberales.
Teniendo en cuenta todo lo expuesto, la CIUDAD podría ser definida como “una comunidad de población concentrada, cuyos habitantes se dedican a actividades no agrícolas preferentemente, que centraliza y dispersa bienes, servicios y comunicaciones en el espacio circundante y cuyos habitantes tienen unos hábitos esencialmente urbanos”.
La situación es la posición de la ciudad en relación con los grandes conjuntos (regiones o vías) que fijan las relaciones necesarias para la realización de sus funciones. La tipología más frecuente de las ciudades en función de su situación es:
El emplazamiento es el espacio concreto y material sobre el que la ciudad se asienta, la topografía, el soporte físico que condiciona su paisaje urbano y su desarrollo espacial y suele estar relacionado con dos factores:
Los planos son un instrumento fundamental para estudiar la morfología urbana, pues permiten conocer la forma general de la ciudad y la de sus unidades básicas. Se suele analizar la estructura de las ciudades atendiendo a tres aspectos:
En la ciudad pueden distinguirse determinadas áreas:
Se caracteriza por ser el lugar donde se concentra la mayor densidad de las actividades terciarias de dirección y de coordinación de la ciudad. No es necesariamente el centro antiguo ni el centro de mayor accesibilidad.
Se trata de un lugar cambiante, que varía con el discurrir histórico en función de su significación. Como tradicionalmente ha sido un lugar deseado para vivir, ha sido foco de especulaciones, vaciándose de residentes y siendo lugar preferente de la administración pública, empresas, tiendas, etc.
En algunas ciudades, como es el caso de Jaén, estas actividades se reducen a pequeñas industrias que no conforman un cinturón y que se situaban tradicionalmente a las afueras de las ciudades, mezcladas con otras instalaciones del sector servicios. En las grandes ciudades españolas, los polígonos industriales se ubican en los alrededores del núcleo urbano o en municipios cercanos.
En ellas, las viviendas ocupan la mayor parte del espacio urbano y se dividen en categorías según el estatus económico de sus habitantes:
Están generalmente situados en la periferia o en el centro, en edificios antiguos o mal equipados. Son barrios dormitorios suburbiales de viviendas protegidas, sociales o casas baratas de ínfimo nivel de urbanización, mala calidad de construcción, etc.
Pueden estar emplazados en torno al centro, con materiales baratos y escasas zonas verdes.
Están bien urbanizados, son tranquilos y cuentan con abundantes espacios verdes.
La función de una ciudad es la de cubrir necesidades (militar, administrativa, industrial, etc.). Las ciudades de cierta importancia acumulan siempre varias funciones, pero toda ciudad, con independencia de su importancia y situación geográfica, posee la función comercial. Para determinar la función o funciones de una ciudad hay que analizar las actividades a las que se dedican sus habitantes (puede investigarse en los censos).
Las ciudades que solo tienen una función se llaman ciudades de función simple (religiosa, militar, administrativa, etc.) y otras ciudades que por el gran número de funciones que desempeñan conforman un área de atracción o “hinterland” sobre la población que vive en los alrededores.
El concepto de ciudad que tienen los niños y niñas evoluciona con la edad. Los más pequeños describen la ciudad aludiendo a aquellos rasgos físicos de la misma que les resultan más llamativos; posteriormente, amplían su campo de observación y son capaces de referirse también a la actividad de las personas que viven en la ciudad.
Para comenzar el estudio de la ciudad, resulta más adecuada la aproximación ideográfica propia del enfoque geográfico regional o historicista, que se centra en la descripción para continuar analizando las relaciones y las realidades del medio urbano.
El método es inductivo, se parte de la observación y la intuición, se continúa comparando y, como última fase, se generaliza. El objetivo de esta metodología es la comprensión de la ciudad desde dentro:
El desarrollo didáctico del tema aconseja y requiere abundante material gráfico, cartográfico, estadístico, informativo-documental e instrumental, graduando su utilización desde elementos y documentos elementales y de fácil manejo hasta otros de mayor complejidad. Se recomienda ampliar en círculos concéntricos el ámbito de estudio, analizando la realidad desde las partes al todo, utilizando la observación e introduciendo desde los elementos intuitivos y vivenciales del niño y de la niña hasta otros más abstractos que responden a realidades más complejas.
Algunos de los problemas más significativos que presentan estas urbes son:
Los valores que están en crisis y deben ser abordados desde las aulas son:
El comportamiento que se rige por el “deber-ser”, la obligación moral y la responsabilidad en las relaciones con los demás: derecho al trabajo, respeto, tolerancia, generosidad o justicia, entre otros.
Aquellos sentimientos e ideas que enriquecen la vida personal pero que no son obligatorios, como por ejemplo: la responsabilidad, la amistad, la comunicación, la amabilidad, el compañerismo, etc.
