Portada » Español » Propiedades y Variedades del Lenguaje: Un Recorrido por la Comunicación Humana
Las lenguas son unidades discretas.
El sistema de signos se divide en partes (palabras, morfemas, etc.), permitiendo una productividad infinita.
Un signo es algo percibido por los sentidos que representa otra realidad. Pueden ser producidos por la naturaleza (como la tos), surgir de una fuerza natural o ser artificiales. Se clasifican como expresivos o comunicativos.
El lenguaje presenta una dualidad: no cambia del todo, pero sí experimenta modificaciones. Una lengua histórica se mantiene comprensible, aunque ciertos elementos evolucionan.
Variedad que se produce por el espacio, es decir, la variedad geográfica. Por ejemplo, no habla igual una persona de Cádiz que de Santander. Los sistemas correspondientes a estas variedades son los dialectos.
Estas variedades demuestran diferencias socioculturales o sociolectos. Por ejemplo, una persona que utiliza arcaísmos (palabras actualmente en desuso) suele ser característica de personas mayores o que viven en zonas rurales, a diferencia de personas urbanas o jóvenes. Esto se relaciona con los niveles del lenguaje que una persona presenta al hablar:
Tienen que ver con el contexto situacional. Dependiendo de la situación, el hablante cambia su registro. Es posible cambiar de registro, pero no de nivel. El hablante debe saber usar el registro adecuado según la situación y el lugar donde se encuentre.
Se caracteriza por la alternancia, la cortesía en la comunicación, la cercanía y la falta de estructuración rígida.
Sigue unas pautas, está planificado y tiene cierto “peso” o relevancia.
Los textos escritos deben estar en un soporte y se clasifican en diferentes modalidades:
Tipo de lenguaje con palabras específicas de un ámbito (por ejemplo, el médico o judicial). Normalmente es difícilmente comprensible para las personas ajenas a ese colectivo.
Designa las jergas de los grupos marginales y se diferencia por el deseo de secretismo en su vocabulario.
La comunicación oral humana es la lengua coloquial, la que utilizamos en diferentes situaciones. Para su estudio, consideramos:
Tanto en la lengua coloquial como en la dialogada, la conversación es espontánea y carece de planificación.
Los elementos suprasegmentales, como la entonación y el volumen de voz, son estudiados por la Paralingüística (subidas y bajadas de tonos).
