Portada » Psicología y Sociología » Fisiología y Psicología del Sueño: Ritmos Circadianos, Fases y Factores Determinantes para la Salud
El descanso es un estado de actividad mental y física reducida que permite al sujeto sentirse fresco, rejuvenecido y preparado para continuar con las actividades cotidianas, facilitando la liberación de la ansiedad.
El sueño es un estado de alteración de la conciencia que se repite periódicamente durante un tiempo determinado, cuya función principal es restaurar la energía y el bienestar de la persona.
Fordham (1988) define el sueño de dos maneras:
El descanso y el sueño son esenciales para la salud y la calidad de vida. Sin un sueño y descanso adecuados, la capacidad de concentración, de enjuiciamiento y de participar en las actividades cotidianas disminuye, al tiempo que aumenta la irritabilidad.
La vigilia prolongada va acompañada de trastorno progresivo de la mente, comportamiento anormal del sistema nervioso, lentitud de pensamientos, irritabilidad y psicosis. El sueño restaura tanto los niveles normales de actividad como el equilibrio entre las diferentes partes del Sistema Nervioso Central (SNC), es decir, restaura el equilibrio natural entre los centros neuronales.
El sueño se caracteriza por una actividad física mínima, unos niveles variables de conciencia, cambios en los procesos fisiológicos del organismo y disminución de la respuesta a los estímulos externos.
El sueño es un fenómeno cíclico que se denomina ciclo de vigilia-sueño, un ritmo circadiano. Este ritmo regula la temperatura corporal, la frecuencia cardiaca, la secreción hormonal y también el estado de ánimo. Los ritmos circadianos son los que más influidos se ven por la luz y la temperatura, aunque estímulos como los hábitos sociales u ocupacionales también pueden afectarlos.
Todas las personas cuentan con relojes biológicos que sincronizan el ciclo del sueño interno. Este reloj está situado detrás del hipotálamo; su ritmo se adapta a factores del entorno como la luz, la oscuridad o la actividad social. A estos factores se les denomina sincronizadores.
El sueño se divide en dos categorías principales:
Caracterizado por movimientos oculares rápidos. Aunque pueden ocurrir sueños, estos no se recuerdan porque no tiene lugar un proceso de consolidación de los mismos en la memoria.
Carece de movimientos oculares rápidos. Se conoce también como sueño de ondas lentas o sueño reparador y está asociado a un descenso del tono vascular periférico, y a una disminución de la presión sanguínea, la frecuencia respiratoria y el metabolismo basal. Representa el 80% de la duración del sueño y está dividida en cuatro etapas:
La ingestión de sustancias o de medicación puede interferir en el sueño:
En la valoración del usuario/paciente, mediante la entrevista, la observación y el entorno, se busca información sobre la satisfacción de esta necesidad. Los problemas más frecuentes son:
Para garantizar un descanso y sueño adecuados, se recomienda:
