Portada » Economía » Evolución de los Modelos de Producción y Estrategias Empresariales Modernas
El origen del trabajo en la industria familiar o doméstica se desarrolló en las ciudades primitivas. Allí, los hombres producían de acuerdo a sus necesidades. Por ejemplo, en Roma, los esclavos trabajaban para los señores feudales.
El número de trabajadores se fue dividiendo y se convirtieron en artesanos, trabajadores ambulantes, etc. Posteriormente, muchos trabajadores ambulantes se establecieron como artesanos con negocios propios.
Con la industrialización, cambiaron las condiciones laborales preindustriales y sus ritmos.
Durante la Segunda Revolución Industrial, Estados Unidos y Alemania ya le disputaban a Inglaterra el liderazgo industrial. Esta etapa se caracterizó por la producción estandarizada y en gran escala de artículos de consumo masivo.
En Estados Unidos se dieron dos movimientos que profundizaron la Revolución Industrial: el Taylorismo y el Fordismo.
Frederick Taylor promovió la especialización del trabajo. Dividió las tareas complejas en múltiples tareas simples y repetitivas. Midió los tiempos y los movimientos correspondientes a cada tarea y estableció cuáles resultaban los más convenientes. Así, el operario tiene establecidos todos los tiempos y debe cumplir una cierta cantidad mínima durante su jornada laboral.
Desarrolló la línea de montaje. Hacia 1912, Henry Ford introdujo el transportador de cinta o de cadena, y a cada operario le asignó una sola tarea. Para esta modalidad, se requieren muchos operarios.
Es un conjunto de nuevas formas de organizar el trabajo. Se origina la producción automatizada, que permite cambiar los productos a fabricar rápidamente. A esto se lo denominó «programación en tiempo real».
Para satisfacer mercados cada vez más amplios, las empresas se ven obligadas a realizar grandes inversiones. Estas demandan una gran cantidad de capital, que no siempre es fácil de conseguir.
Consiste en un proceso de integración de la economía a nivel mundial. Todo el mundo es un gran mercado en el que se desenvuelven empresas multinacionales, que buscan la mayor rentabilidad posible.
Se entiende por Calidad Total no solamente productos de alta calidad que tiendan al cero defecto, sino también una mayor calidad en los procesos que llevan a obtener esos productos.
Es el método japonés de mejora continua. Su fundamento filosófico no se reduce a la mejora continua en la producción, sino también en la vida personal, familiar y social.