Portada » Economía » La Empresa: Funciones, Estrategia y Contexto Económico
Una empresa es la unidad económica de producción que combina los factores productivos (tierra, capital y trabajo) para producir bienes y servicios. Todo ello es coordinado y dirigido por el empresario bajo una serie de condiciones de riesgo.
Para poder producir bienes y servicios, es necesario transformar materias primas y otros factores productivos. La empresa, al transformar los factores productivos en productos más elaborados, los hace más útiles y, por tanto, satisface más necesidades, creando así valor.
A medida que el producto ha pasado por fases de elaboración en diferentes empresas, su utilidad se ha incrementado y, con ello, su precio. Dado que los bienes creados valen más que los factores productivos utilizados, decimos que la empresa crea valor. Este valor creado (la diferencia entre el valor del producto y el valor de los factores usados) es lo que se denomina valor añadido.
La empresa debe pagar las materias primas, máquinas y trabajadores para producir bienes y servicios. Sin embargo, mientras este dinero se gasta de manera inmediata, los ingresos solo se reciben cuando los bienes producidos son vendidos. La empresa asume un riesgo porque paga los factores productivos (trabajadores, materiales, etc.) antes de saber si podrá vender los productos que estos producen, asumiendo, por tanto, un riesgo. La empresa asume un riesgo porque paga los factores productivos (trabajadores, materiales, etc.) antes de saber si podrá vender los productos que estos producen, asumiendo, por tanto, un riesgo.
Las empresas contribuyen a la sociedad de muchas maneras. Producen bienes de calidad para los individuos, generan empleo y permiten ofrecer una variedad donde los consumidores puedan elegir. Además, muchas investigan y crean nuevos productos que aumentan la calidad de vida de la sociedad y permiten el progreso. Por ejemplo, el primer ordenador personal lanzado por IBM fue clave para que hoy podamos hacer cosas que antes eran imposibles.
Para producir un bien, es necesario realizar una serie de tareas. Una función clave de las empresas es coordinar todo el proceso de producción para que se realicen todas las tareas y se produzcan los bienes. Además, la empresa debe decidir qué materias primas adquirir, qué proceso de producción utilizar o qué tecnología implementar.
La misión es el propósito de la empresa, es decir, explica la razón de su existencia. Responde a preguntas como: ¿Quiénes somos? ¿Por qué existimos?
Ejemplos de misión de empresas:
La visión es una declaración general de dónde la empresa desea estar en un futuro ideal. Responde a preguntas como: ¿Qué queremos ser? La visión de la empresa debe ser clara, atractiva y desafiante. Debe servir para guiar y motivar a la empresa hacia el éxito y para inspirar a los empleados a trabajar juntos hacia un objetivo común.
Ejemplos de visión de empresas:
Los valores de una empresa son las creencias fundamentales que guían su comportamiento. Estas creencias son utilizadas por la empresa para tomar decisiones, tanto las más importantes como las del día a día. Los valores pueden ser utilizados como una guía para el comportamiento y la toma de decisiones de los empleados, así como para las decisiones estratégicas de los gerentes de la empresa.
Algunos de esos valores pueden ser: la innovación, la orientación al cliente, la calidad, la responsabilidad social, etc.
Ejemplos de valores de empresas:
El entorno son todos los factores que rodean a la empresa y, por tanto, le afectan. Estos factores pueden ser tanto beneficiosos como perjudiciales, por lo que influyen en las decisiones de las empresas y en sus beneficios. Se diferencian dos entornos: el general y el específico.
El entorno general comprende factores que afectan por igual a todas las empresas de una determinada región. Para conocer estos factores, recurrimos al análisis PEST (Político-legal, Económico, Sociocultural y Tecnológico).
Las políticas económicas del gobierno y las distintas leyes que regulan la actividad económica pueden afectar la realidad de la empresa y sus decisiones. Nos referimos a toda la legislación que debe cumplir una empresa, como normas de competencia, de publicidad, de protección del medio ambiente, etc. También son claves los impuestos y la seguridad social que hay que pagar.
La situación general de la economía, los tipos de interés, el desempleo, el nivel de renta de los ciudadanos, etc., son factores que pueden hacer que una empresa venda más o menos, o que pueda producir más o menos barato, lo que influye en sus decisiones.
Se refiere a factores como el nivel educativo, los estilos de vida, los hábitos de consumo, etc. Todos estos factores también influyen en las decisiones de las empresas.
Los cambios tecnológicos influyen en los productos que una empresa puede fabricar. Los continuos avances hacen que los productos queden obsoletos cada vez antes y las empresas deben reaccionar para no quedar anticuadas. Además, las nuevas tecnologías también abren posibilidades a nuevas formas de consumo.
El entorno específico se refiere a los factores particulares que afectan a un conjunto de empresas que tienen características comunes o están en un mismo sector. Podemos diferenciar los siguientes factores:
El número de clientes y su comportamiento suponen un factor clave que afecta a las decisiones de la empresa. Las decisiones de una empresa pueden cambiar mucho según el tipo de clientes que tenga.
Las acciones de los proveedores pueden ser claves para una empresa. Es importante saber el poder que tienen los proveedores para poner precios más altos o bajos y si respetan los acuerdos.
Muchas veces, los competidores condicionan las decisiones de una empresa. Para una empresa es clave conocer el número de competidores que tiene y la manera en la que se comportan.
A veces, las empresas dependen de intermediarios para hacer llegar el producto a los clientes. En algunos sectores, estos intermediarios tienen gran poder, lo que influye en los ingresos que obtienen las empresas.
El Análisis DAFO (también conocido como FODA o SWOT por sus siglas en inglés) consiste en realizar un doble análisis externo e interno que nos permite conocer las Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades de la empresa.
Consiste en analizar todos los factores del entorno general que pueden afectar a la empresa (factores políticos, económicos, sociales y tecnológicos), conocido como análisis PEST. Asimismo, debemos analizar los factores del entorno específico, que incluyen el análisis de clientes, la competencia y los proveedores. Para ello, podemos usar las fuerzas competitivas de Porter. Este análisis nos debe proporcionar las oportunidades y amenazas de la empresa.
Consiste en analizar la propia empresa, tanto sus actividades como sus recursos clave (recursos humanos, tecnología, organización, etc.) para detectar dónde puede tener ventajas con la competencia. El análisis nos debe proporcionar las fortalezas y debilidades de la empresa (podemos usar el análisis de la cadena de valor de Porter).
Una persona desempleada es aquella que, siendo mayor de 16 años, está buscando trabajo, pero no lo encuentra. El total de personas desempleadas de un país es lo que llamamos desempleo.
Por tanto, decimos que hay desempleo cuando la cantidad de trabajadores que desean trabajar (oferta de trabajo) es superior a la que las empresas desean contratar (demanda de trabajo).
El efecto más obvio es que muchas familias se quedan en una situación de precariedad, que les impide satisfacer sus necesidades básicas. De hecho, se estima que el 25% de los españoles vive en una situación de pobreza relativa.
Cuando la tasa de desempleo es alta, muchas personas tienen menos ingresos disponibles para gastar en bienes y servicios. Esto puede reducir la demanda general de los consumidores, lo que puede afectar negativamente a las empresas. Sin embargo, algunas empresas pueden verse beneficiadas si venden productos más baratos o alternativas a otros de más calidad. Por ejemplo, cuando hay más personas que no encuentran empleo, aumenta la compra de marcas blancas o las reparaciones.
Cuando la tasa de desempleo es alta, algunas empresas pueden tener dificultades para encontrar quiénes les presten dinero, ya que los prestamistas suelen ser más cautelosos. Esto puede hacer que las empresas tengan problemas para hacer sus pagos y el riesgo de quiebra aumenta.
Si la tasa de desempleo es baja, es posible que haya una mayor competencia entre las empresas para contratar a los trabajadores. Pero si la tasa de desempleo es alta, las empresas no tendrán que competir para contratar trabajadores, con lo que podrán pagar menos salarios y tener menos costes.
La inflación es el crecimiento generalizado y sostenido (continuo) de los precios de los bienes y servicios de una economía.
Cuando los precios suben mucho, como en los primeros años del 2000, los trabajadores piden que les aumenten el sueldo. En principio, si los precios suben al doble y nuestro sueldo también, podremos comprar las mismas cosas. El problema es que los salarios nunca suben tanto como los precios. De hecho, los sueldos en España aumentaron muy por debajo de lo que lo hicieron los precios. Obviamente, si los precios son mucho más altos y nuestro salario sube solo un poco, podemos comprar muchas menos cosas.
El problema del aumento de los precios es que no se sabe exactamente cuándo y cuánto van a aumentar los precios de los productos.
La inflación aumenta los costes de producción de las empresas, ya que los precios de las materias primas, los salarios y otros factores pueden aumentar. Todo esto provocará que, o bien tengan menos beneficios, o bien tengan que aumentar sus precios para cubrir los mayores costes.
Cuando los precios aumentan, el poder adquisitivo de los consumidores disminuye. Esto puede afectar la demanda de los productos de la empresa, lo que puede llevar a una disminución en las ventas y los ingresos.
La inflación puede generar incertidumbre en el entorno económico, lo que puede dificultar la planificación y la toma de decisiones empresariales.
Para combatir la inflación, los bancos centrales pueden aumentar los tipos de interés. Esto puede hacer que sea más difícil obtener préstamos para la empresa y que tengan que pagar más intereses por el dinero prestado.
Ocurre cuando hay un exceso de demanda de bienes. Esto sucede:
Ocurre cuando aumentan los costes de las empresas, lo que hace que estas suban los precios.
El tipo de interés es el porcentaje que tiene que pagar de intereses sobre la cantidad prestada la persona que pidió el préstamo (prestatario), y que, por tanto, recibirá el que prestó el dinero (prestamista).
Resulta que comprar dinero cuesta dinero. El tipo de interés es el precio del dinero, lo que nos va a costar que nos presten dinero o lo que recibiremos si lo prestamos nosotros.
En realidad, cada uno puede exigir el tipo de interés que quiera por el dinero que quiere prestar, al igual que un panadero puede poner el precio que desee al pan. Es una cuestión de oferta y demanda.
En los países que tienen el euro como moneda, el Banco Central Europeo (BCE) toma una decisión muy importante. El BCE presta dinero a los demás bancos de la zona euro a un tipo de interés de referencia.
De manera general, podemos decir que el tipo de interés irá en aumento con el riesgo y con el plazo.
Prima de Riesgo.
Los costes sociales son aquellos provocados por las empresas, pero soportados por toda la sociedad sin que las primeras paguen por ellos. Estos costes sociales también se llaman externalidades negativas.
La Responsabilidad Social Corporativa (RSC) o Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es el comportamiento voluntario de las empresas para que sus actuaciones tengan repercusiones positivas en la sociedad.
La generación de riqueza, de puestos de trabajo y el pago de impuestos son varias de las principales responsabilidades de la empresa con la sociedad. Las empresas responsables contribuyen al desarrollo económico de su entorno.
La empresa debe incorporar todas las preocupaciones de la sociedad y mejorar las relaciones con los grupos implicados en su actividad: trabajadores, consumidores, proveedores o el Estado. Las empresas responsables tienen a sus trabajadores en condiciones dignas, informan a sus consumidores, respetan los acuerdos con los proveedores, las leyes del Estado, etc. Además, defienden la igualdad entre hombres y mujeres y los derechos humanos.
El deterioro del medio ambiente ha sido alarmante en los últimos 50 años. Las empresas responsables intentan reducir el impacto contaminando menos, consumiendo menos energía, haciendo un tratamiento adecuado de los residuos, creando envases ecológicos, etc.
El objetivo final es que las empresas acaben siendo responsables, no solo para cumplir la ley o para mejorar su imagen, sino porque es lo correcto.
El I+D+i (Investigación, Desarrollo e Innovación) es el gasto que realizan muchas empresas o el Estado en investigación para adquirir conocimientos que puedan ser aplicados a mejorar productos o procesos productivos.
Son las actividades que tratan de aprovechar todos los conocimientos aprendidos en la investigación para desarrollar nuevos productos o procesos productivos. Por ejemplo, el ibuprofeno.
Ocurre cuando las novedades son introducidas en el mercado. Supone la creación de nuevos o mejores productos, procesos de producción o modelos de negocio que satisfacen mejor nuestras necesidades y solucionan mejor nuestros problemas. Podemos distinguir 4 tipos: