Portada » Español » Conceptos Fundamentales de Lingüística Española: Morfología, Semántica y Evolución del Lenguaje
La lingüística es la ciencia que analiza cómo funciona el lenguaje humano, y se divide en varias partes:
Es una entidad perceptible que se asocia con un significado. Es algo que representa otra cosa. Una de las características más notables de la especie humana es su capacidad de manejar signos. Tendemos a extraer significado de cualquier variación de nuestro entorno, con independencia de que esta haya sido producida con fines comunicativos o no. Los signos actúan como mediadores o intermediarios entre dos usuarios.
Según Peirce, hay tres tipos de signos:
Las lenguas son sistemas de símbolos: el vínculo entre palabras y significados es arbitrario y convencional.
El signo lingüístico, según Saussure, tiene dos partes:
La semántica es la parte de la lingüística que estudia el significado de las palabras, frases y oraciones. El interés por el significado empezó en la Antigua Grecia, con filósofos como Platón y Aristóteles, quienes se preguntaban si las palabras tienen un sonido que se parece a lo que significan (naturalistas) o si simplemente usamos esas palabras porque la sociedad lo decidió (convencionalistas).
Durante la Edad Media y el Renacimiento, los estudiosos se centraron en la etimología, es decir, en investigar el origen de las palabras. Creían que a cada palabra le correspondía un único significado natural y trataban de reconstruir la historia de cada término.
En el siglo XIX, surgió la semántica histórica, que defendía que los cambios de significado no son caóticos, sino que siguen ciertas reglas, igual que ocurre con los sonidos en la fonética histórica.
Luego, en el siglo XX, con el lingüista Ferdinand de Saussure, nació la semántica estructural, que propone que el significado de una palabra no se entiende de forma aislada, sino por cómo se relaciona con otras dentro del sistema lingüístico. Esto dio lugar a los campos semánticos, grupos de palabras que comparten una categoría (por ejemplo: frutas, colores, animales).
Finalmente, a partir de los años 80, surgió la semántica cognitiva, que dice que el lenguaje está influido por nuestro cuerpo, nuestras emociones y el entorno. Para esta corriente, las metáforas y las comparaciones no son solo adornos, sino formas naturales de pensar y entender el mundo.
La semántica es la parte de la lingüística que estudia el significado de las palabras y las frases. Se centra en entender qué quieren decir las palabras y cómo se relacionan entre ellas, mientras que otras ramas se fijan más en la forma o la estructura. Por eso, la semántica es clave para saber qué decimos y la pragmática para entender cómo lo interpretamos.
Es la unidad mínima con significado que se puede pronunciar de forma independiente.
Ejemplo: perro, casa, bonito, correr
La morfología es la parte de la lingüística que estudia la estructura de las palabras y cómo se forman. Se divide en dos grandes ramas:
Estudia los cambios de forma que puede tener una palabra sin alterar su significado básico, como variaciones de género, número, tiempo, modo, etc. Se refiere a cómo cambian las palabras para indicar persona, número o tiempo.
Se ocupa de la formación de nuevas palabras a partir de otras mediante el uso de prefijos (al inicio) o sufijos (al final). Analiza cómo se forman nuevas palabras a partir de otras.
Las palabras son unidades lingüísticas con significado que se distinguen de otras por pausas al hablar o por espacios al escribir.
Los prefijos no tienen sentido por sí solos. Se pueden combinar con otros prefijos. Normalmente, no cambian de categoría gramatical (ej. juicio – prejuicio). Algunos sí cambian (ej. multiusos). A veces se unen a raíces que no existen como palabras independientes.
Los sufijos también pueden combinarse entre ellos. Hay dos tipos:
Son formas intermedias entre una palabra y un grupo de palabras, con una evolución gradual. Se diferencian en varios aspectos:
Los extranjerismos son palabras o expresiones tomadas de otras lenguas.
Según su origen, se clasifican en:
La semántica léxica estudia el significado de las palabras y cómo se relacionan entre sí.
Son palabras que significan casi lo mismo. Aunque pocas veces son totalmente intercambiables, sí tienen significados parecidos.
Ejemplos de diferencias entre sinónimos:
Cuando una palabra está dentro del significado de otra.
Palabras con significados contrarios.
Tipos:
A veces, no se usan palabras únicas, sino frases con el mismo significado.
Ejemplo: Medidas adoptadas = resultado aprobado por el Congreso de Ministros.
También hay ambigüedad cuando una palabra puede tener varios significados. Esto ocurre por:
Dos palabras se escriben o pronuncian igual, pero tienen origen y significado diferentes.
Una palabra tiene varios significados relacionados. Ejemplo: banco (entidad financiera / asiento).
Tienen un significado muy general, sirven para muchas cosas, pero son poco precisas.
La lengua cambia en varios niveles:
Para que un cambio en la lengua se consolide, debe:
Ejemplo de cambio por moda: La palabra latina mensa fue reemplazada por tabula y dio origen a:
A veces hay resistencia. El Appendix Probi (siglo III) recoge errores que se criticaban, como: