Portada » Diseño e Ingeniería » Supuestos Estadísticos Clave para ANOVA y Modelos ANDEVA
Al realizar análisis estadísticos como el ANDEVA, es fundamental verificar ciertos supuestos sobre los datos. Dos de los más importantes son la Normalidad (los residuos siguen una distribución normal) y la Homocedasticidad (igualdad de varianzas entre grupos). A continuación, se discuten algunas pruebas comunes para estos supuestos, junto con sus ventajas y desventajas.
Tanto la prueba de Cochran como la de Bartlett funcionan de manera similar y se utilizan para el mismo propósito: evaluar la igualdad de varianzas.
Cumplir con los supuestos de Normalidad y Homocedasticidad es crucial al realizar un Análisis de Varianza (ANDEVA) por varias razones:
Los modelos de ANDEVA varían según el número de factores (vías) que se estudian simultáneamente y cómo se estructura el diseño experimental.
Se utiliza cuando se investiga el efecto de un único factor (con dos o más niveles) sobre una variable de respuesta continua. El objetivo es determinar si las medias de los grupos definidos por los niveles del factor son significativamente diferentes.
Este diseño se emplea para controlar una fuente de variabilidad conocida y no deseada (el factor de bloqueo) que podría influir en la variable de respuesta. Al agrupar las unidades experimentales en bloques homogéneos, se aísla la variabilidad debida al bloque del error experimental, aumentando la precisión al evaluar el efecto del factor principal. Se sigue haciendo inferencia sobre un factor principal, y en el modelo básico no se considera la interacción entre el factor principal y el bloque.
En este modelo, se investiga simultáneamente el efecto de cuatro factores sobre una variable de respuesta. El modelo incluye los efectos principales de cada uno de los cuatro factores, así como todas las posibles interacciones entre ellos (interacciones de dos, tres y cuatro factores). Esto genera un gran número de efectos a estimar e interpretar.
El enunciado «a medida que aumenta el número de vías, el modelo se asemeja más a la realidad, por lo que mientras más vías se tenga, mejor» es **incorrecto**.
Si bien un modelo con más vías puede, en teoría, capturar interacciones complejas que existen en la realidad, esto no lo hace inherentemente «mejor». Las diferencias entre los modelos radican en el número de factores estudiados y, crucialmente, en el número de preguntas de investigación que se abordan (efectos principales e interacciones).
Al aumentar el número de vías, el número de efectos a investigar crece exponencialmente (como se ve al comparar un modelo de 1 vía con uno de 4 vías). Esto significa que hay muchas más hipótesis que probar y resultados que interpretar y discutir.
Un mayor número de vías puede diluir el poder estadístico para detectar efectos individuales o interacciones específicas, a menos que el tamaño muestral sea muy grande. La interpretación de interacciones de alto orden (entre múltiples factores) puede ser extremadamente compleja y a menudo menos relevante o interpretable que los efectos principales o interacciones de bajo orden.
Por lo tanto, un modelo con más vías no es automáticamente «mejor». La elección del modelo debe basarse en la pregunta de investigación específica, la teoría subyacente que guía el estudio y la capacidad práctica para diseñar un experimento con suficiente poder y para interpretar los resultados complejos. Un modelo de 1 vía, al centrarse en un único factor, a menudo permite una interpretación y conclusión más directa y poderosa sobre el efecto de ese factor principal.
La regla de decisión para la prueba F en cualquier Análisis de Varianza es unilateral, es decir, de una sola cola (la cola superior o derecha), a pesar de que la hipótesis nula (H₀) postula la igualdad entre las medias de los grupos.
Esto se debe a cómo se construye el estadístico de prueba F: es la razón entre el Cuadrado Medio del Tratamiento (CMtrat) y el Cuadrado Medio del Error (CMerror):
F = CMtrat / CMerror
La hipótesis nula (H₀: las medias de los grupos son iguales) implica que la variabilidad entre los grupos (reflejada en CMtrat) es similar a la variabilidad dentro de los grupos (reflejada en CMerror), que se considera variabilidad aleatoria o error. Bajo H₀, se espera que la razón F sea cercana a 1.
La hipótesis alternativa (H₁: al menos una media es diferente) implica que la variabilidad entre los grupos es mayor que la variabilidad dentro de los grupos. Si hay un efecto real del tratamiento o factor, el CMtrat será significativamente mayor que el CMerror, resultando en un valor de F grande.
¿Qué pasaría si fuera bilateral?
Una prueba bilateral tendría zonas de rechazo en ambas colas. Un F grande (CMtrat >> CMerror) caería correctamente en la zona de rechazo derecha. Sin embargo, un F muy pequeño (CMerror >> CMtrat) también caería en una zona de rechazo (la izquierda). Rechazar H₀ basándose en un F muy pequeño no tiene sentido en el contexto del ANDEVA, ya que un F pequeño no proporciona evidencia de que las medias sean diferentes; más bien sugiere que la variabilidad dentro de los grupos es mayor que la variabilidad entre ellos, lo cual es consistente con la hipótesis nula o indica otros problemas, pero no apoya la hipótesis alternativa de diferencias entre medias.
Por lo tanto, solo nos interesa detectar valores de F que son significativamente mayores que 1, lo que corresponde a la cola superior de la distribución F. La prueba F está diseñada específicamente para detectar si la variabilidad explicada por el modelo (entre grupos) es significativamente mayor que la variabilidad no explicada (error), lo cual justifica el uso de una prueba unilateral.