Portada » Derecho » Fundamentos del Derecho: Instituciones Europeas y Conceptos Jurídicos Clave
Los Tratados de Roma de 1957 fueron fundamentales para la integración europea. El primero estableció la Comunidad Económica Europea (CEE), sentando las bases para un mercado común, y el segundo creó la Comunidad Europea de la Energía Atómica (Euratom), enfocada en el desarrollo pacífico de la energía nuclear.
El Consejo de la Unión Europea, también conocido como Consejo de Ministros, es una institución central de la UE. En él se encuentran representados los gobiernos nacionales de los 27 Estados miembros a través de sus ministros. Junto con el Parlamento Europeo, el Consejo ejerce las funciones legislativa y presupuestaria. Es, por tanto, un órgano colegislador con ciertas funciones políticas suplementarias.
El Parlamento Europeo representa directamente a los ciudadanos de los Estados miembros. Su función principal es el control y la supervisión democrática de las instituciones de la UE, además de participar activamente en el proceso legislativo.
La Comisión Europea encarna la rama ejecutiva del poder comunitario. Sus funciones principales incluyen:
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) interpreta el Derecho de la UE para garantizar que se aplique de la misma forma en todos los países miembros. También resuelve conflictos legales entre los gobiernos y las instituciones de la UE. Particulares, empresas y organizaciones pueden acudir al Tribunal si consideran que una institución de la UE ha vulnerado sus derechos.
El Tribunal de Justicia cuenta con un juez por cada país de la UE y está asistido por ocho abogados generales. La labor de estos últimos consiste en presentar, con imparcialidad e independencia, dictámenes sobre los asuntos planteados al Tribunal. El mandato de los jueces y de los abogados generales es de seis años, con posibilidad de renovación, y son designados de común acuerdo por los gobiernos de los países miembros.
El Tribunal General es competente para conocer de recursos interpuestos por particulares, empresas y algunas organizaciones, así como de asuntos relacionados con el Derecho de la competencia.
Los cinco tipos de procedimientos más comunes ante el TJUE son:
El sistema de normas de la UE se compone de normas originarias y derivadas:
El Derecho Originario es aquel contenido en los diversos tratados que los Estados miembros suscriben. Constituye la fuente de mayor rango y posibilita la aparición del Derecho Derivado, que está sometido a él. El Derecho Derivado no solo cederá en caso de contradicción con el Originario, sino que además debe estar fundamentado y originado en los diferentes Tratados que lo componen.
Dentro de esta categoría se incluyen todas las normas contenidas en los Tratados Constitutivos originales, como el Tratado de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA), el Tratado de la Comunidad Económica Europea (CEE) y el Tratado de la Comunidad Europea de la Energía Atómica (CEEA).
Se incluyen en esta categoría los tratados que, a lo largo del tiempo, han ido modificando las disposiciones fundacionales. Los más importantes son:
También se incluyen en esta categoría los Tratados de Adhesión de cada uno de los Estados que se han ido adhiriendo a las Comunidades Europeas, puesto que alteran los Tratados fundacionales, al menos en lo que se refiere a la constitución de las instituciones comunitarias.
El Derecho Derivado emana de las instituciones de la UE y debe respetar el Derecho Originario. Sus principales instrumentos son:
En materia laboral, el legislador se propone regular el sector para que los individuos y empresas puedan desarrollar su actividad con plenitud de derechos. Esto implica la ordenación del mercado laboral (parte del Derecho Público) y las relaciones de los sujetos con las Administraciones públicas, así como los derechos de los sujetos implicados y los contratos que celebren (parte del Derecho Privado).
El Derecho Laboral tiene sus raíces en diversas etapas históricas:
El Derecho cumple diversas funciones esenciales en la sociedad: