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Nelson regresa a su país después de tres años y su madre, Ruby Mbizi, lo recibe con mucha alegría en el nuevo aeropuerto. De camino a casa, Nelson observa cambios en su barrio, pero muchas cosas siguen igual. Ruby intenta presentarle a tres primas para que salga con ellas, pero Nelson no muestra interés. Mientras desayunan, Philomena, la empleada, pide ayuda para unos niños huérfanos que han perdido a sus padres, pero Ruby se niega diciendo que no puede ayudar a todos los necesitados. Nelson siente pena, pregunta más sobre los niños, aunque piensa que no puede hacer mucho porque no tiene dinero ni permiso para involucrarse. El capítulo muestra el contraste entre la riqueza de la familia Mbizi y la dura realidad que vive mucha gente en su país, y deja ver que Nelson es más sensible y diferente a sus padres.
Nelson regresa a su país tras tres años y se reencuentra con su madre, aunque su padre está ocupado en el Parlamento. Su padre quiere que trabaje pronto en el hotel familiar, pero Nelson, algo desanimado, decide visitar Sector D, una zona pobre de la ciudad que siempre le habían prohibido. Allí descubre la dura realidad de muchos niños huérfanos por culpa del SIDA, especialmente la historia de Daniel y sus hermanos. Durante un funeral improvisado, Nelson observa a Viki, una periodista valiente que denuncia frente a las cámaras el silencio y la vergüenza de los gobiernos frente a la enfermedad. Nelson queda muy impresionado por la pobreza, la dignidad de la gente y la fuerza de Viki. Aunque siente que no puede hacer mucho, empieza a preguntarse si debería implicarse más en esa realidad que siempre le habían enseñado a ignorar.
Nelson llega al hotel de su padre, donde empieza su primer trabajo en la contabilidad. Aunque no le interesa, se sorprende de lo bien que lo entiende. Esa noche sueña con Viki, quien está en peligro, lo que lo deja inquieto. Mientras tanto, Daniel se encuentra con Eddy, quien se va a trabajar a un taller en Sector C. Daniel canta sobre el regreso de Eddy y la situación difícil que viven. Nelson, por su parte, sigue sintiendo una desconexión con sus amigos y se enoja cuando su padre le niega un salario, aunque le ofrece un adelanto. Un día, después de una discusión entre sus padres, Nelson se siente confundido acerca de la familia y sus planes. Su madre le asegura que luchará por su futuro, y más tarde, ve un reportaje sobre Daniel cantando bajo un árbol, lo que lo hace reflexionar.
Nelson, después de un momento de confusión y enojo, decide nadar en la piscina para calmarse. Al día siguiente, se encuentra con su padre en su oficina, quien está preocupado por una llamada importante. Nelson aprovecha la ocasión para preguntar sobre el manejo del hotel, pero también se interesa por los programas del SIDA y la posible malversación de fondos. Al hacerle preguntas sobre sus hermanos, su padre se enfurece y le da un golpe en la cara. Después de esta confrontación, Nelson se va a su trabajo, sabiendo que la noticia del incidente ya se ha esparcido por el hotel. En Sector D, Eddy regresa a casa después de su jornada laboral, encontrando a Lily Anne, Daniel y Blessing sin comida. Mr. Nakula, el dueño de la tienda de la calle, les ofrece una oportunidad: alquilar su casa y mudarse para poder obtener dinero y comida. Tras una conversación entre los jóvenes, deciden aceptar la oferta, aunque Lily Anne sigue siendo cautelosa respecto a Mr. Nakula. La historia culmina con Lily Anne saliendo en secreto de la casa durante la noche, llevando consigo su última moneda de la suerte.
Nelson, después de su pelea con su padre, decide que necesita un salario adecuado para poder trabajar en la empresa familiar. Habla con su padre y Fletcher, anunciando su intención de ser un empleado oficial. Su padre no reacciona con violencia, lo que sorprende a Nelson. Al día siguiente, Nelson realiza trámites bancarios y se dirige a Sector D para averiguar cómo están los niños. Descubre que Daniel ahora vive con Givemore Chivasa y que Lily Anne y Blessing están siendo cuidadas por la familia Nakula. Aunque las cosas parecen mejorar para los niños, Nelson se preocupa por la separación de la familia debido a la falta de dinero. Nelson visita a Daniel y a los Chivasa, quien lo recibe amablemente. Durante su visita, Daniel le agradece por acordarse de ellos. Nelson también contacta con Phil, el camarógrafo que grabó la historia de Daniel, para saber si habrá más cobertura del tema. Aunque Phil le ofrece el número de la periodista Viki, Nelson duda en llamarla.
Nelson y Philomena decidieron llevar a Lily Anne y Blessing a la casa de Nelson durante unos días. Temían por su seguridad después del abuso por parte de los hermanos Nakula. Lily Anne había estado usando una «sonrisa» para conseguir comida de Mr. Nakula, lo que llevó a avances no deseados. Ella temía que los hermanos le hicieran daño, especialmente porque uno de ellos podría estar infectado con el VIH. Después de discutir la situación y los riesgos del VIH, decidieron alojar temporalmente a los niños en la casa de Nelson, en la cabaña para el personal. Planeaban llevarlos a una clínica para hacerles pruebas y esperaban mantenerlos a salvo mientras decidían los próximos pasos. Nelson también estaba preocupado por que su madre se enterara de que los niños se quedaban con ellos. La prioridad era proteger a Lily Anne y Blessing de más daño.
Nelson se encuentra con Viki y le cuenta sobre los niños y la difícil situación en la que viven. Viki se interesa por su historia y acuerdan reunirse al día siguiente en el hospicio donde están los niños, Blessing y Lily Anne. Allí, Viki ve las condiciones en las que viven y se compromete a ayudar, considerando hacer un reportaje sobre ellos para obtener más apoyo. Nelson, preocupado por su familia, mantiene la situación en secreto, ya que sus padres no saben nada sobre los niños. Aunque las cosas son complicadas en casa, Nelson sigue adelante con su plan de ayudar a Daniel, quien está luchando para ganar dinero con su música. Nelson espera que un reportaje de Viki ayude a Daniel a ser reconocido y obtener oportunidades. A pesar de las dificultades, Nelson mantiene la esperanza de que las cosas mejorarán para los niños y Daniel, aunque sabe que aún queda mucho por hacer.
Nelson se siente abrumado por los acontecimientos cuando su madre lo llama a la medianoche. Descubre que su padre, Washington Mbizi, ha estado recibiendo amenazas de muerte relacionadas con acusaciones de corrupción y robo de fondos del gobierno. Por precaución, Washington decide salir del país y le pide a Nelson que se haga cargo de sus negocios mientras él está fuera. A pesar de la sorpresa, Nelson asume la responsabilidad de gestionar las empresas familiares. Mientras organizan los papeles legales, Ruby, la madre de Nelson, también se prepara para irse al extranjero para protegerse de las posibles acusaciones. Antes de irse, le susurra a Nelson que cuide de todo, ya que no saben cuándo regresarán. Después de que sus padres se van, Nelson se siente completamente solo, con la carga de miles de trabajadores y múltiples negocios. La situación se complica cuando la policía llega a la casa en busca de su padre, acusándolo de robo. Nelson, intentando mantener la calma, les dice que su padre no está allí y les deja revisar la casa.
Nelson fue secuestrado y llevado a una celda sucia, donde un agente de la policía secreta lo interrogó sobre el paradero de su padre. Aunque no sabía la respuesta, el agente no le creyó. Finalmente, sin órdenes claras sobre qué hacer con él, lo liberaron. De vuelta en casa, descubrió que su hogar había sido intervenido con micrófonos. Cansado, durmió hasta la tarde y, al despertar, recibió una noticia alentadora: una organización benéfica podría financiar su centro juvenil con café, música y un espacio para pruebas y asesoramiento sobre VIH. Guiado por el Sr. Chivasa, encontró un antiguo garaje que, con esfuerzo, podría convertirse en el centro soñado. Decidido, haría todo lo posible para sacarlo adelante.
Nelson trabajó en su plan de negocios para el centro comunitario mientras notaba que un coche negro lo seguía. Después de tomar medidas en el viejo garaje, visitó a la hermana Michael en el hospicio junto con Daniel y le habló sobre su idea para educar a la comunidad de Sector D sobre el VIH sin estigmas. Ella apoyó su plan, pero le advirtió que conseguir medicamentos sería difícil debido a la escasez. También insinuó que las acusaciones de corrupción contra su padre podrían ser una tapadera para el robo de fondos del sector salud. Nelson sospechó que había figuras poderosas involucradas, pero decidió mantenerse alejado de la política. Después de finalizar su plan con la ayuda de la hermana Michael, lo envió para su aprobación. Una vez enviado a una organización benéfica en Estados Unidos, solo le quedaba esperar. Cuando Philomena mencionó que su madre había llamado, intentó comunicarse con ella, pero su número ya no estaba en servicio.
Nelson recibió la visita de un hombre misterioso que le advirtió que su padre, quien había estado en Johannesburgo, ahora estaba desaparecido y en peligro. Poco después, Nelson recibió un correo confirmando que su centro comunitario había sido aprobado por la organización benéfica. Más tarde, su madre lo llamó desde un número desconocido, asegurándole que su padre seguía vivo pero que debían mantenerse ocultos. Nelson celebró con la comunidad de Sector D el inicio del centro y organizó el trabajo de limpieza. Mientras tanto, Daniel fue descubierto por el famoso cantante Kundai Kambera, quien lo invitó a cantar en su concierto. Emocionado, Daniel visitó la tumba de su madre y luego llamó a un periodista para contarle sobre el concierto y el centro comunitario.
Nelson recibió noticias de su padre a través de la abogada Murape: un comprador australiano llamado Paul Walker llegaría al día siguiente para discutir la compra del Lion Hills Hotel. En Sector D, Nelson encontró el centro comunitario casi listo. Daniel y Eddy estaban allí, cuando de repente se enteraron de que Blessing había muerto. Afectados por la noticia, decidieron ir al hospicio. Durante el camino, Daniel llamó a Phil para cancelar la cobertura de la TV, pero Viki insistió en filmar el funeral, diciendo que las historias tristes atraen audiencia. Daniel se sintió disgustado. Mientras tanto, Nelson reflexionó sobre la ira y la tristeza, recordando su difícil relación con su padre.
Al amanecer, todos estaban en el cementerio excepto Nelson, que fue a recibir al australiano. Daniel enfrentó a Viki, prohibiéndole interferir en el funeral. Blessing fue enterrado en silencio sobre su madre, y el dolor se hizo presente cuando Lily Anne se desmayó. Después, Daniel encaró a Viki por explotar tragedias para la televisión. Su discusión fue intensa hasta que Viki, afectada, rompió en llanto. Daniel recordó las palabras de Nelson sobre la ira y, en un gesto de compasión, le devolvió su cuaderno. Más tarde, compartieron un almuerzo con Phil, donde Daniel notó que Viki tomaba pastillas en secreto. Al confrontarla, ella lo rechazó, pero terminó aceptando su invitación para visitar el Garage.
Mientras conducían, Daniel pensaba en Viki y en cómo le diría a Nelson. Al llegar al Garage, Viki quedó impresionada con el lugar. Cuando Nelson llegó, Daniel le contó que había visto a Viki tomando ARVs. Nelson, sorprendido, entendió muchas cosas. Poco después, Viki se sentó junto a él y confesó que fue contagiada sin saberlo. Se sentía robada de su futuro, pero Nelson la tomó de la mano y le aseguró que no tenía que estar sola. Luego, se prepararon para la noche: Daniel ensayaría para el show, Nelson iría a su reunión y todos se encontrarían en el estadio. Nelson, eufórico por lo que sentía por Viki, se dirigió a vender el hotel, soñando con tener más tiempo para estar con ella.
En el estadio, Viki y Phil llegaron primero. Phil insinuó que Viki debía quedarse más tiempo para hablar con Nelson. Daniel llegó corriendo, repartió los boletos y desapareció. Cuando Nelson llegó, se sintió feliz al ver a Viki. Durante la conversación, él le pidió visitarla en Jo’burg. Ella dudó, pero finalmente aceptó disfrutar el presente juntos. El concierto comenzó con Daniel en el escenario. Cantó con emoción y su última canción habló sobre aceptar el amor sin importar el estatus. El público lo ovacionó. Viki, emocionada, se fue a grabar un segmento con Phil. Nelson, feliz por la venta del hotel y por saber que su padre estaba bien, confesó a Sister Michael que Viki era importante para él, aunque sabía que habría desafíos. Cuando Viki regresó, le tomó la mano en la oscuridad y, en un momento de ternura, lo besó.