Portada » Psicología y Sociología » Desarrollo Infantil: Etapas, Teorías y Factores de Influencia
Desarrollo físico: crecimiento del cuerpo y cerebro que incluye patrones de cambio en capacidades sensoriales, habilidades motoras y salud.
Desarrollo cognitivo: patrón de cambio en las capacidades mentales, como el aprendizaje, atención, memoria, lenguaje, pensamiento, razonamiento y creatividad.
Desarrollo psicosocial: patrón de cambio en emociones, personalidad y relaciones sociales.
Damos seguimiento a estos desarrollos a través de la lactancia, primera infancia, segunda infancia, tercera infancia y adolescencia.
Muchos cambios típicos de la lactancia en la primera infancia, como el surgimiento de las capacidades para caminar y hablar, están vinculados con la maduración del cuerpo y el cerebro: el desarrollo de una secuencia natural y universal de cambios físicos y conductuales que incluyen la disposición para dominar nuevas capacidades como caminar y hablar.
Incluye el ingreso, la educación y la ocupación. Es la combinación de factores económicos y sociales, incluyendo ingresos, educación y ocupación, que describen a un individuo o familia. El NSE afecta de manera indirecta estos resultados por medio de factores asociados, como el tipo de hogar y vecindario en que viven los niños, al igual que la calidad de la nutrición, atención médica, supervisión, instrucción escolar y otras oportunidades disponibles para ellos.
Condiciones que aumentan la posibilidad de un resultado negativo del desarrollo. Los niños de familias más adineradas también pueden estar en riesgo. Debido a que los padres se encuentran ocupados, presionan a los niños a alcanzar logros. Además, con frecuencia los dejan solos y, por tal motivo, estos niños pueden tener elevadas tasas de abuso de sustancias, ansiedad y depresión.
Se refiere al modo total de vida de una sociedad o grupo, que incluye costumbres, tradiciones, creencias, valores, lenguaje y productos físicos, todo lo cual constituye comportamiento aprendido que se transmite de padres a hijos.
Jean-Jacques Rousseau creía que los niños nacían como «buenos salvajes» que se desarrollaban según sus propias tendencias naturales positivas, a menos de que se vieran corrompidos por la sociedad.
El debate entre las filosofías de Locke y Rousseau condujo a dos modelos e imágenes contrastantes del desarrollo humano: mecanicista y organísmico.
Los teóricos consideran que el desarrollo es continuo, como caminar o gatear por una rampa. Por otro lado, los teóricos organísmicos enfatizan el cambio cualitativo; consideran que el desarrollo sucede en una serie de etapas bien diferenciadas, como los peldaños de una escalera. En cada etapa, las personas se enfrentan a diferentes tipos de problemas y desarrollan capacidades distintas.
A medida que ha evolucionado el estudio del desarrollo infantil, los modelos mecanicistas y organísmicos han variado en cuanto a la influencia que ejercen. La mayoría de los primeros pioneros teóricos, incluyendo a Sigmund Freud, Erik Erikson y Jean Piaget, favorecían los enfoques organísmicos o de etapas.
Define el desarrollo como moldeado por fuerzas inconscientes que motivan a la conducta humana.
Creía que las personas nacen con pulsiones biológicas que deben redirigirse para hacer posible que vivan dentro de una sociedad. Freud propuso tres instancias hipotéticas de la personalidad que se desarrollan al inicio de la vida:
Freud propuso que la personalidad se forma a través de los conflictos inconscientes entre los impulsos innatos del Ello y las exigencias de la vida civilizada: una secuencia invariable de 5 etapas de desarrollo psicosexual basadas en la maduración, en las que el placer cambia de una zona del cuerpo a otra. Consideraba que las primeras tres etapas (dentro de los primeros 5 o 6 años de edad) eran esenciales para el desarrollo de la personalidad.
Aunque Freud abrió nuestros ojos a la importancia de los impulsos sexuales tempranos, muchos psicoanalistas actuales rechazan su estrecho énfasis en las pulsiones sexuales y agresivas a exclusión de otros motivos. Freud surgió de su lugar en la historia y la sociedad; no basó sus teorías acerca del desarrollo normal en una población de niños promedio, sino en una clientela de adultos de clase media, principalmente mujeres bajo terapia. Su concentración en las influencias de los impulsos sexuales y de la experiencia temprana no tomó en cuenta influencias diferentes y posteriores sobre la personalidad, incluyendo las influencias de la sociedad y la cultura que enfatizan muchos de los herederos de la tradición freudiana como Erik Erikson.
Modificó y amplió la teoría freudiana al enfatizar la influencia de la sociedad sobre la personalidad en desarrollo. Erikson fue pionero de la perspectiva del ciclo vital. Mientras que Freud sostenía que las experiencias infantiles tempranas moldeaban la personalidad de manera permanente, Erikson mantenía que el desarrollo del Yo era vitalicio. La teoría del desarrollo psicosocial de Erikson abarca 8 etapas a lo largo del ciclo vital; cada etapa implica lo que Erikson originalmente llamó una «crisis de personalidad». Su teoría es importante debido a su énfasis en las influencias sociales y culturales, así como en el desarrollo más allá de la adolescencia.
Sostiene que el desarrollo es el resultado del aprendizaje, un cambio duradero en la conducta que se basa en la experiencia o la adaptación al ambiente. Dos importantes teorías son el Conductismo y la Teoría del Aprendizaje Social.
Es una teoría mecanicista que describe la conducta observada como una respuesta predecible ante la experiencia. Dos tipos de aprendizaje asociativo son:
El psicólogo estadounidense Albert Bandura desarrolló muchos de estos principios. Mientras que los conductistas perciben que el ambiente, al actuar sobre el niño, es el ímpetu principal para el desarrollo, Bandura sugiere que el ímpetu hacia el desarrollo es bidireccional. La teoría clásica del aprendizaje social sostiene que las personas aprenden la conducta social apropiada principalmente por medio de la observación e imitación de modelos; este proceso se denomina modelamiento o aprendizaje observacional.
La versión más nueva de la teoría de Bandura se denomina teoría sociocognitiva. La evolución del nombre refleja el énfasis en que los procesos cognitivos son centrales al desarrollo.
Se centra en los procesos del pensamiento y en las conductas que reflejan dichos procesos. Esta perspectiva engloba teorías de influencia tanto organísmica como mecanicista e incluye la teoría de las etapas cognitivas de Piaget, así como la teoría sociocultural del desarrollo cognitivo de Vygotsky.
Lo que entendemos acerca de la manera en que los niños piensan se debe en gran medida al trabajo del teórico suizo Piaget. Biólogo y filósofo de profesión, percibía el desarrollo de manera organísmica, es decir, como producto de los esfuerzos de los niños por comprender su mundo y actuar sobre él. Piaget sugirió que el desarrollo cognitivo se inicia a partir de una capacidad innata para adaptarse al ambiente.
Describió que el desarrollo cognitivo sucede en 4 etapas cualitativamente distintas que presentan patrones universales. Durante cada etapa, la mente del niño desarrolla una nueva forma de operar, desde la lactancia hasta la adolescencia. Este crecimiento cognitivo ocurre a partir de tres procesos interrelacionados:
