Portada » Economía » Emprendimiento Sostenible: Impacto Social, Ambiental y Ética Empresarial
En última instancia, los emprendedores son personas con diversas motivaciones para iniciar un negocio.
Por tanto, el emprendimiento es el resultado de una iniciativa personal derivada de una combinación de motivaciones. Sin embargo, pueden existir otro tipo de motivaciones, como la resolución de problemas de la sociedad o la voluntad de transformar el mundo.
Estas son las motivaciones que promueven los emprendimientos sostenibles, y que difieren de los emprendimientos comerciales tradicionales.
Es un modelo de gestión que garantiza la continuidad a largo plazo de la empresa a la vez que contribuye al progreso actual y futuro de la sociedad a través del equilibrio entre tres dimensiones de la sostenibilidad: la económica, la social y la ambiental.
Es un concepto con origen en el Informe Brundtland (1987), definido como “las formas de progreso que satisfacen las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades”.
Han surgido otras definiciones, pero todas incluyen las tres dimensiones (económica, social y ambiental) y el componente intergeneracional.
Las Naciones Unidas elaboraron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Son un conjunto de metas y logros a determinado plazo que buscan que todas las personas puedan acceder a sus necesidades y satisfacerlas desde una mirada global, sin comprometer la posibilidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas.
Existen dos aspectos fundamentales:
Es sinónimo de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y cobró fuerza entre fines del siglo XX y principios del siglo XXI.
Todas las empresas producen externalidades negativas (y también positivas). Por ejemplo:
La RSC se define como el “conjunto de acciones que realizan las empresas para que sus actividades tengan repercusiones positivas sobre la sociedad y que afirman los principios y valores por los que se rigen”.
Estas acciones son de carácter voluntario y, a menudo, se realizan con fines comerciales y de mejora de imagen y reputación, más que como una estrategia deliberada. Es importante destacar: la RSC no significa sostenibilidad.
Es el conjunto de valores, normas y principios que rigen el comportamiento de una organización en relación con su entorno.
Se traduce en un código ético que es recomendable definir al momento de diseñar la misión y la visión de la empresa, debiendo poner en valor lo social y lo ambiental.
Se trata de un emprendimiento que enlaza las tres dimensiones de la sostenibilidad: económica, social y ambiental.
Es viable económicamente y genera un impacto positivo a nivel social y/o ambiental. Esto significa que la creación de valor no es exclusiva para la empresa y sus propietarios, sino también para el resto de la sociedad.
Mientras que el emprendimiento comercial busca satisfacer a sus shareholders (accionistas), el emprendimiento sostenible busca satisfacer a sus stakeholders (grupos de interés).
Busca resolver un problema social a través del desarrollo de un negocio o de una actividad.
Importante: no es caridad ni tiene por qué estar relacionado con una organización sin fines de lucro. Su objetivo es crear valor social de forma rentable, lo que quiere decir que es compatible con la rentabilidad económica. Son una empresa y se diferencian de otras organizaciones por su forma de financiamiento.
También llamado ecoemprendimiento o emprendimiento verde, está centrado en el medio ambiente y en generar valor ambiental.
Están vinculados a las nuevas economías (verde, azul, circular, etc.) y se encuentran en todas las ramas de actividad.
Existe la creencia de que generar valor social y/o ambiental sacrifica valor económico-comercial de un emprendimiento. Sin embargo, diversos estudios han demostrado que no es así.