RELACIONES SEMÁNTICAS ENTRE SIGNOS. DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN: La semántica se ocupa de los cambios de significación que se operan en las palabras, como ciencia día crónica. La significación es el proceso que asocia un objeto, un ser, a un signo susceptible de evocarlos. Un signo es un estímulo asociado a otro estímulo, del cual evoca la imagen mental. Significación es un proceso psíquico, las imágenes de las cosas y la idea de ellas nos formamos. Triángulo de la comunicación de Saussure: REFERENTE SIGNIFICANTE SIGNIFICADO. La comunicación sea eficaz, cada significante debe relacionar exclusivamente con un significado y una referente. 2.RELACIONES SEMÁNTICAS ENTRE LAS PALABRAS: tipos: 2.1 Identidad de significados: SINONIMIA relación existente entre dos o más unidades léxicas con distinto significante e igual significado. No existen sinónimos perfectos. Clases de sinonimia: – Conceptual: coincidencia de semas denotativos. – Referencial: cuando coinciden los referencias, aunque no coincidan los semas denotativos. – Contextual: conmutabilidad de dos términos en un contexto sin alterar el significado de la secuencia. – De connotación: cuando dominan las connotaciones afectivas pueden borrarse totalmente el contenido conceptual y ciertos términos son equivalentes. 2.2 Identidad de significantes: – Polisemia: existencia de varias acepciones para un mismo significado. Dependen del contexto. Todos los significados contextuales surgen de un núcleo originario que se ha ido ampliando. – Homonimia: coincidencia entre significantes puramente casuales, por razones históricas. Pertenecen a categorías gramaticales distintas. Los términos homónimos pueden ser: a) Homógrafos: se pronuncian y se escriben igual. B) Homófonos: se pronuncian igual, pero se escriben diferentes. 2.3 La jerarquización de significados: – Hiperónimo: el significado de un término incluye el otro. – Hipónimo: El término cuyo significado se incluye en otro más amplio. El hiperónimo contiene menos semas que los hipónimos. Cada hipónimo puede ser su vez ser hiperónimo de otras unidades léxicas. 2.4 La oposición de significados: – Antonimia: Oposición de significados que admite gradación. – Complementariedad: opuestos donde no es posible la gradación ni los términos medios.
– Reciprocidad: términos que se implican mutuamente. 3 DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN: – Significado denotativo o conceptual: coincide con el conjunto de semas diferenciadores de un término. Este significado es el que marca la referencia de una palabra al mundo extralingüístico, y es compartido por los hablantes en cualquier contexto. – Los significados connotativos: el término es capaz de evocar por razones sociolingüísticas o estilísticas. Algunas connotaciones son compartidas por todos los hablantes, otras son propias de un grupo o incluso de un individuo. TEMA 2. LA GENERACIÓN DEL 98. 2.1 Definición Y Carácterísticas: movimiento literario e intelectual que surgíó del desastre del 98, caracterizado por la presencia del tema de España, sus preocupaciones filosóficas y, frente al esteticismo modernista, por un estilo sencillo, natural y sobrio. Miembros: el grupo de los tres (Azorín, Baroja y Macztu), Unamuno y, Antonio Machado y Valle-Inclán. Grupo enmarcado dentro de: el Modernismo con el que comparte la crisis de la pequeña-burguésía. Los autores fueron afectados por un compromiso político e intelectual dentro de la ideología regeneración insta, propugnada por la Institución libre de Enseñanza de Francisco Giner de los Ríos. Precursores, los regeneristas: Joaquín Costa y Ángel Ganivet, encuentran su influencia literaria en los clásicos: El Cantar de Mío Cid, Berceo, Fray Luis, Quevedo y Cervantes. Sus obras están influidas por las corrientes filosóficas del momento: Kierkegaard, Schopenhauer, Nietzsche y Bergson. Etapas: – Juventud del 98: hasta 1900, rebeldía ante la sociedad y la cultura española, reflejo de la crisis de la conciencia de la burguésía. – Activismo del grupo de Los Tres: 1901-1904, Azorín, Baroja y Maeztu publican un Manifiesto regeneracionista y europeísta para cambiar la situación española mediante una «ciencia social» que analice los problemas de España y busque soluciones. – Madurez y disolución del 98: a partir de 1910, cada autor toma su camino en lo ideológico y estético, pero siguen teniendo un idealismo comprometido. Carácterísticas generales: – Europeísmo y gusto por lo castizo: intento de elevar España a la altura de Europa. Significa abrirse a las corrientes modernas de pensamiento y vivir en un espacio amplio y sin fronteras. El amor a España llevó a los noventayochistas a profundizar en el conocimiento del español. Ven la autenticidad de España en la Castilla medieval, libre, poderosa e invicta. – Sobriedad: los noventayochistas huyen de la grandilocuencia retórica y buscan la máxima claridad y llaneza. Buscan términos poco frecuentes o arcaísmos. – Subjetivismo: la evolución de la reflexión intelectual sobre el problema de España hacia posturas intimistas lleva a la subjetividad y a ofrecer una visión introspectiva de la realidad. – Idealización del paisaje: La austeridad y sobriedad del paisaje castellano es el símbolo del alma castellana. De aquí deriva el concepto que aparece en la obra de Unamuno de intrahistoria. – La preocupación por los problemas de España: les hace subordinar la forma al contenido, recurren preferentemente al ensayo o a novelas de tesis donde priman las ideas y las reflexiones filosóficas y políticas a otros elementos propios de la novela como el argumento. – Reflexiones filosóficas: los noventayochistas reflexionan sobre el sentido de la vida, la religión. Influidos por el positivismo inglés algunos autores y otros por el idealismo alemán. – Espiritualismo: respuesta a la insatisfacción con el mundo. Lleva a manifiestar un espiritualismo torturado en Unamuno. O una inclinación a identificar a Dios con la Naturaleza, que es el panteísmo que encontramos en la poesía de Juan Ramón Jiménez. 2.2. La Prosa Narrativa Y Ensayística: Pío Baroja, Azorín, Valle-Inclán, y Miguel de Unamuno: El ensayo fue el género de mayor difusión a principios del siglo, se convirtió en el vehículo para transmitir la ideología noventayochista. Temas como la muerte, la religión, son tratados por Unamuno, Azorín y Maeztu. Aparece una corriente innovadora en la forma de entender y construir una novela. Las tres novelas que marcan la ruptura con el Realismo anterior son: La voluntad de Azorín, Amor y pedagogía de Unamuno y Camino de perfección de Baroja, las tres de 1902. Se puede añadir Sonata de Otoño de Valle-Inclán. Este movimiento rupturista coincide en dos puntos: – Irrupción del subjetivismo: no satisface la reproducción pura de la realidad, sino su reflejo en el individuo y los procesos que desencadena en la conciencia. La realidad quedará fuertemente influida por la sensibilidad personal. Se consigue a través de un empleo especial del lenguaje. – Una clara preocupación artística, pero de forma desigual. Los cuatro afrontan el relato como arte, con el propósito de renovar el estilo y las estructuras narrativas, las técnicas de la novela. Pío Baroja: 1872-1956 novelista más importante de la Generación del 98, producción orientada hacia temas existenciales y sociales, pero con la narrativa de acción y de aventuras. Para Baroja, la novela es una pieza literaria en la cabecera absolutamente todo: reflexiones filosóficas, confesiones políticas, humorismo, aventuras y duras críticas sociales. Técnica narrativa se basa en la espontaneidad y la observación de la realidad inmediata. Argumento de sus novelas, la evolución existencial de un solo protagonista y, otros personajes secundarios que aportan datos acerca del central. Estructura principal simple y se subsana por frecuentes diálogos, descripciones de lugares e historias particulares de los secundarios. Estilo, breve, claro y preciso. Los personajes antihéroes abocados al fracaso. Ocho trilogías y dos tetralogías: Tierra vasca, El mar, La raza, La juventud perdida. TÍtulos: El árbol de la ciencia 1911. José Martínez Ruíz, Azorín: 1873-1967 sensibilidad de carácter anarquista, tenía el propósito de conocer tanto su paisaje como la situación social de sus gentes, que era de extrema miseria. Junto a Ramiro de Maeztu y Pío Baroja, una viva admiración por la obra de Nietzsche, como por las doctrinas de carácter revolucionario. Evoluciónó hacia otras posturas ideológicas más conservadoras. El objeto primordial del artista ha de ser otro la percepción del lo sustantivo de la vida, lo decisivo no está en «los grandes hombres, las ruidosas pasiones, sino en lo minúsculo, lo atómico». Técnica narrativa impresionista que aspira a ofrecer la esencia espiritual de las cosas mediante descripciones líricas en las que predominan la expresión de la emoción del artista. Obsesión del tiempo, la serena contemplación del paisaje y de la historia y una renovada sensibilidad ante los clásicos. Su producción literaria se divide en el ensayo y la novela. Como ensayista se centro en el tema del paisaje de España: Castilla 1912, y en la reinterpretación de las obras literarias clásicas: Ruta de Don Quijote 1905, Clásicos y modernos 1913. Cuatro etapas: – La primera: muestra predominio de los elementos autobiográficos y de impresiones suscitadas por el paisaje. Protagonista Antonio Azorín, personaje de ficción que se convierte en la conciencia de su creador. Son un pretexto para desarrollar las experiencias vitales y culturales del autor, La voluntad (1902), Antonio Azorín 1903. – Segunda: abandona los elementos autobiográficos, pero continúa reflejando sus inquietudes en los personajes: la obsesión por el tiempo, el destino. Doña Inés 1925, Don Juan 1922, basada en la conversión cristiana del mito. – Tercera: Félix Vargas 1928 y Pueblo 1930, marcadas por el Vanguardismo y por el drama personal y cosmológico inspirado en el gran poeta Rainer María Rilke. – Cuarta: tras un período de silencio profundamente marcado por la contienda civil, vuelve a la narrativa con El escritor 1941, María Fontán 1943 y La isla sin aurora 1944. Miguel de Unamuno: 1864-1936 Estudió Filosofía y Letras, obtuvo la cátedra de griego en la Universidad de Salamanca de la que fue rector. La preocupación por España como En torno al casticismo 1895 y Por tierras de España y Portugal 1911. Analiza la esencia del alma española y desarrolla el concepto de «intrahistoria»: la historia cotidiana de los ciudadanos que también forman parte de la vida del país y que no es recogida en los tratados al uso. Trayectoria espiritual a través de ensayos como Vida de Don Quijote y Sancho 1905, Del sentimiento trágico de la vida 1913, tratan los temas de: la conciencia de la propia existencia y el miedo a la no existencia, que le lleva a la religión, producíéndose así el conflicto angustioso entre razón y fe. Rasgos principales novelas: renuncia a cualquier preparación previa; suprime descripciones y situaciones; presenta al protagonista en su lucha existencial, que suele ser un reflejo de la del propio autor; uso del diálogo hasta el punto de que adquiere una importancia fundamental en la narración. Renueva la técnica narrativa hasta que él llama «nivolas». Las principales son Niebla 1914, La tía Tula 1921 y San Manuel Bueno, mártir 1930, desaparición de la trama o el argumento y su sustitución por un estudio en profundidad de la psicología de los personajes.